Juan Alberto Arancibia: En Puerto Lirquén “estamos volviendo a invertir para reposicionarnos en la región”

 

Puerto Lirquén cierra 2015 con cifras al alza y con interesantes proyecciones para este 2016. Durante los próximos 12 meses espera continuar con la ejecución de un ambicioso plan de inversiones, del orden de los 40 millones de dólares, el cual les permitirá movilizar mayores niveles de carga y ser una alternativa competitiva para quienes utilizan, día a día, los puertos del JUAN ALBERTO ARANCIBIA PUERTO LIRQUENBio Bio.

En entrevista con PortalPortuario.cl, el gerente general de la compañía, Juan Alberto Arancibia, repasa el presente año y proyecta los desafíos para 2016.

¿Cuál es el balance del 2015 en Puerto Lirquén? ¿Qué hitos sobresalieron este año?

El 2015 ha sido mejor que el 2014. Logramos movilizar más carga, principalmente producto de nuevos clientes y contratos, sobre todo en el área contenedores. Terminamos muy bien prospectados para el 2016, con una base de clientes y líneas navieras que obviamente nos hacen ver con optimismo el año que se inicia. Los hitos más relevantes tienen que ver con lo comercial. Logramos captar y recuperar clientes grandes en contenedores (Hamburg Su?d, Hapag Lloyd, junto a CMA CGM y CSCL), como también un servicio mediano de contenedores (Hanjin, Hyundai y Yang Ming); esto nos da una base de volumen mayor, que permite proyectar para el próximo año alrededor de 6,2 millones de toneladas de carga movilizada. Todo este volumen irá asociado a otro hito: nuestro directorio aprobó un plan de inversiones para 2015-2016 para equipamiento nuevo, ampliación de muelle, pavimentación de patio y accesos; programa del orden de los 40 millones de dólares que se gatilló el segundo semestre de 2015 y se mantendrán por todo 2016.

¿Con qué volúmenes de carga se proyecta el cierre del año?

Este año vamos a terminar con 4,9 millones de toneladas.

¿Qué cargas han tenido mayores volúmenes en 2015?

Las cargas forestales break bulk como  celulosa, con casi un millón 800 mil toneladas, y las maderas verdes, con 700 mil ton m3. Está el fertilizante, con otras 420 mil ton; el resto de carga suelta (ceniza de soda, klinker, cemento, fierro), con otras 300 mil ton; y en contenedores casi un millón 800 mil ton.

¿En qué consiste el plan de inversiones que están llevando a cabo? 

En materia de equipamiento, la compra de dos grúas móviles de muelle, seis equipos reachstakers para la manipulación de contenedores en patios y en depósitos, 10 portrucks y sus respectivos chassis, y grúas horquilla para la consolidación y recepción de carga. En infraestructura destacaría tres puntos. Uno, la ampliación del muelle 2, que se alargará de 268 a 360 metros de atraque; está por adjudicarse el contrato y el 1 de febrero probablemente parta la construcción, la que durará 10 meses. Dos, la pavimentación del Patio La Tosca, el relleno marítimo que hicimos entre 2008 y 2010; allí vamos a pavimentar seis hectáreas adicionales, lo que nos va a dejar un área para acopio de contenedores y de otras cargas (por ejemplo, cargas de proyecto); esto nos va a permitir trabajar con un mejor lay out del puerto, más eficiente. Tres, un acceso mejor y más eficiente para el Patio Hospital, que es un patio extraportuario nuestro.

Tanto la inversión en equipamiento como en infraestructura totalizarán alrededor de US$ 40 millones y se ejecutarán durante la última parte de este año y el 2016.

¿En qué posición los dejará este plan en relación a las demás alternativas portuarias de la competitiva Región del Bio Bio?

Estamos volviendo a invertir para reposicionarnos como una de las mejores alternativas de la región. A nivel de equipamiento y frente de atraque vamos a tener instalaciones muy competitivas. Así, para los clientes quedamos siendo una opción importante dentro de la zona.

¿Cómo ha sido la implementación de la ley corta en su terminal? ¿En qué estado se encuentran las relaciones con los trabajadores?

El ícono de esta ley corta es la implementación de los comedores para la media hora de colación y descanso, lo que ha funcionado bastante bien. Las instalaciones son de alto nivel, muy confortables; incluso fueron reconocidas por la ministra del Trabajo, quien vino hace un mes.

Es pertinente recordar que Puerto Lirquén se adelantó a esta mejora al inaugurar, en 2011, un moderno Edificio del Trabajador Portuario único en Chile, dotado de casino, áreas de esparcimiento, camarines, baños y salas de capacitación de primer nivel. Respecto a las relaciones laborales, éstas se encuentran en muy buen pie; durante 2015 se ha negociado prácticamente con todos los sindicatos y estamos todos remando para el mismo lado: orientados al aumento de volumen, la captación de nuevos clientes y la entrega de un buen servicio.

En materia logística, ¿qué brechas u obstaculizadores persisten en la Región del Bio Bio en ese sentido y que debieran eliminarse en favor del comercio exterior?

Existe una gran brecha en materia de conectividad ferroviaria que amerita una inversión y una preocupación particular del Estado. Es necesaria una visión de mediano y largo plazo para generar mayor capacidad a las líneas actuales y, a la vez, mayor cobertura a través de nuevas líneas y accesos a la región.

En carreteras efectivamente se ha avanzado, con la Ruta 160, Cabrero e Itata, pero considerando el crecimiento en las cargas que se espera para los próximos diez años las carreteras pronto van a colapsar.

El ferrocarril es un medio bastante eficiente para las cargas industriales y mucho más amigable ambientalmente hablando. Además, la ampliación es a bajo costo, porque se puede invertir en lo que ya existe para aumentar velocidad y toneladas por eje, lo que permitiría aumentar la capacidad de carga hasta en un 50%, como también el largo de los trenes: de 700 a 1.000 metros. Adicionalmente se puede aumentar la capacidad vía nueva infraestructura, sobre todo porque hoy no tenemos un acceso ferroviario a la región por el norte (hoy se debe dar la vuelta por San Rosendo). Por último está el tema de la cola de maniobras que permita fraccionar los trenes para redistribuir los carros a los distintos terminales de la región. Esto antes se hacía en la estación de Concepción y hoy debe hacerse en Arenales, Talcahuano, lo cual ralentiza el desplazamiento.

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