Por Redacción PortalPortuario
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AAL Shipping (AAL) transportó una carrocería de grúa de 560 toneladas desde Kobe (Japón) a Nueva Orleans (EE.UU.) a lo largo de su ruta comercial habitual entre Asia y las Américas a bordo del buque de carga pesada AAL Kembla de 31.000 TPM.

En total, el envío incluía el cuerpo de la grúa, de 20,14 metros de largo, 15,5 metros de ancho y 19 metros de alto, así como una pluma de grúa de 60 toneladas y cinco cangilones de gran tamaño, cada uno de más de 100 toneladas, todos destinados a la empresa de soluciones marinas Curtin Maritime, con sede en EE.UU.
En Kobe, una barcaza cargada con los componentes llegó junto al buque de clase A para su carga, y la posición de cada unidad a bordo se planificó de acuerdo con el alcance de las grúas de 350 toneladas de capacidad de AAL Kembla. Las grúas se desplegaron en tándem para proporcionar una carga útil máxima de 700 toneladas, con dos puntos de elevación determinados para cargar 302 toneladas y 258 toneladas respectivamente.
Las condiciones climáticas adversas obligaron al equipo de ingeniería de AAL en el lugar a ajustar el plan de elevación, garantizando que las operaciones pudieran acelerarse de manera segura para evitar demoras en la secuencia de carga.
“La rápida respuesta de nuestro equipo para modificar el plan de elevación fue fundamental para evitar demoras y mantener los estándares de seguridad. Este nivel de flexibilidad en nuestras operaciones nos permitió cumplir con los compromisos con nuestros clientes y cumplir con el cronograma de nuestra Ruta Comercial Asia-América, llegando a Nueva Orleans hacia fines de diciembre de 2024”, explicó Nicola Pacifico, director de Ingeniería de Transporte de AAL.
En Nueva Orleans, el plan original era descargar la carga mediante una grúa flotante en la barcaza grúa del cliente. Sin embargo, un cambio en los requisitos significó que se volvieron a utilizar las grúas de carga pesada de AAL Kembla para realizar la carga pesada, esta vez para descargar las unidades en una barcaza de material.
“Cualquier operación de carga que implique cargar o descargar en barcazas es muy complicada, y se vuelve aún más compleja debido al gran tamaño y peso de los componentes involucrados. Se realizaron múltiples simulaciones de estabilidad para garantizar que cada etapa de la operación se llevaría a cabo dentro de los límites de seguridad establecidos, a pesar de la difícil distribución del peso. Esto dio como resultado una planificación cuidadosa de la secuencia de descarga y la posición de otras cargas para garantizar que hubiera suficiente estabilidad de reserva para cada operación de elevación pesada”, agregó Pacifico.