Por Redacción PortalPortuario/Agencia Reuters
El Representante Comercial de Estados Unidos (USTR) suavizó las propuestas de tarifas para los buques que transporten gas natural licuado (GNL) y car carriers no construidos en el país norteamericano, lo que se da en medio de sus continuos esfuerzos por contrarrestar el dominio de China en alta mar y revivir la industria naval estadounidense.
La propuesta revisada, presentada por la USTR, eliminaría las sanciones relacionadas con el GNL por no exportar un porcentaje de combustible en navíos de propiedad estadounidense.
Lo tratado también reduciría las tarifas cuando los navíos de transporte de automóviles de fabricación extranjera visiten puertos de Estados Unidos y, además, eximiría a dichas naves cuando presten servicio en las fuerzas armadas estadounidenses.
La USTR exceptuó previamente a los buques que transportaban exportaciones estadounidenses, así como a los operadores de navíos más pequeños, de las tasas portuarias inicialmente destinadas a las motonaves vinculadas con China. La agencia también hizo lo propio con las unidades que prestan servicios en los Grandes Lagos, el Caribe y territorios estadounidenses.
“Este es un paso en la dirección correcta y esperamos trabajar con el USTR en una solución que garantice que el GNL estadounidense siga siendo competitivo a nivel mundial”, comentó Rob Jennings, vicepresidente de mercados de gas natural del Instituto Americano del Petróleo.
En abril, la USTR sorprendió a la industria del gas natural licuado con sus nuevas normas para los envíos salientes de ese combustible, lo que desató una protesta.
También sorprendió a la industria de transporte de vehículos con un plan para imponer tarifas portuarias a todos los buques de construcción no estadounidense en ese segmento, incluidos los navíos con bandera estadounidense y con tripulación estadounidense admitidos en el Programa de Seguridad Marítima de Estados Unidos (MSP) que apoya la preparación militar de Washington.
El USTR eliminó recientemente un texto que decía que podría suspender las licencias de exportación de GNL hasta que se cumplieran sus reglas para mover un porcentaje de los envíos en naves construidas y operadas en Estados Unidos.
El 17 de abril, el USTR sostuvo que los productores de GNL tendrían que movilizar el 1% de sus envíos en motonaves construidas en Estados Unidos a partir de abril de 2029. Ese porcentaje aumentaría al 15% en abril de 2047 y después.
El Consejo Naviero Mundial, cuyos miembros incluyen transportistas de vehículos como el noruego Wallenius Wilhelmsen, no hizo comentarios inmediatos sobre las revisiones.
La tarifa para el transporte de vehículos, vigente a partir del 14 de octubre, debía ser de 150 dólares por vagón de carga de un buque no construido en Estados Unidos, conocido como buque de carga rodada (RoRo). Los RoRo típicos tienen capacidad para transportar casi 5000 vehículos.
En la revisión, la USTR redujo esa tasa a 14 dólares por tonelada neta. También eximió a los navíos del MSP, así como a la carga del gobierno estadounidense, igualando las exenciones previas otorgadas a otros segmentos de buques.
Entre las empresas con naves en el MSP se encuentra American Roll-On, Roll-Off Carrier Group, con sede en Florida, un operador de transportadores de vehículos con bandera estadounidense que forma parte de Wallenius Wilhelmsen Group, que no hizo comentarios de inmediato.
Las tasas RoRo se suman a las elevadas tasas del 25% sobre las importaciones de automóviles impuestas por Trump. Estas afectan principalmente a los vehículos europeos. Los exportadores estadounidenses también utilizan RoRo para movilizar SUV BMW y John Deere fabricados en Estados Unidos, junto a otras mercancías.
Los grupos de la industria naviera y los abogados han dicho que la USTR se extralimitó al imponer tarifas a los RoRo fabricados en países que no formaron parte de la investigación acelerada de la administración Biden sobre China.
Las revisiones del USTR continuaron haciendo referencia a portavehículos “no construidos en Estados Unidos”. Las partes interesadas, que anteriormente no tuvieron la oportunidad de comentar las reglas para los buques RoRo o los buques metaneros, tienen hasta el 7 de julio para enviar sus comentarios sobre las revisiones.