Mediante una declaración pública, la Cancillería  respondió al ministro de Relaciones Exteriores de Bolivia, David Choquehuanca, quien acusó que Chile incumple el tratado de 1904 al impedir el libre tránsito de sus mercancías hacia los puertos chilenos debido al paro que llevan a cabo la Asociación Nacional de Funcionarios de Aduanas (Anfach).

En esa línea el Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile precisó que el mencionado paro se ha generado por iniciativa autónoma de los trabajadores de aquella institución.

De acuerdo al Minrel, se trata de manifestaciones laborales emanadas de funcionarios de servicios públicos chilenos, que no resulta posible impedir por un mero acto de autoridad. Por ello, esta situación y sus consecuencias no son atribuibles al Estado de Chile.

Por otra parte, la operación y el manejo del Puerto de Arica ha continuado conforme a los procedimientos habituales, siguiendo los protocolos acordados para las cargas sujetas al libre tránsito, sin haberse detenido su atención.

En tanto, el puerto de Antofagasta ha estado operando normalmente y la carga ha salido sin interrupciones.

Asimismo,  el ministerio informó que  el control fronterizo de Chungará, el más utilizado por la carga boliviana en tránsito, funciona con total normalidad.

También, de acuerdo al Minrel, debe hacerse presente que los efectos del paro, que, como se acaba de señalar, no han significado un bloqueo ni un impedimento al libre tránsito ni al comercio exterior boliviano, han alcanzado a todos los usuarios de los pasos fronterizos y puertos de Chile independientemente de su nacionalidad, incluyendo a los propios chilenos.

Todo lo anterior permite afirmar la utilización política por parte de Bolivia de una situación laboral que afecta transitoriamente a Chile, ignorando los ingentes esfuerzos y medidas adoptadas por Chile para dar pleno cumplimiento a sus compromisos de buena vecindad. Llama profundamente la atención esta actitud boliviana frente a la comprensión manifestada por otros países limítrofes.