Por Redacción PortalPortuario.cl

@PortalPortuario

La diputada por la Región de Valparaíso, María José Hoffmann, cuestionó el rol de los concesionarios de los terminales portuarios de la zona a quienes tildó de “espectadores” al no contribuir al impulso de reformas laborales y ambientales.

“Yo soy diputada de los dos puertos más importantes de Chile, San Antonio y Valparaíso, y permítanme decir que soy primera mayoría en todas mis elecciones, que hoy día -además- están en el suelo, entonces yo no entiendo por qué, los operadores privados, los concesionarios de mis puertos no son capaces de impulsar una reforma; por ejemplo, de seguridad laboral, de medioambiente, sabiendo todos los conflictos medioambientales que vienen en la construcción de estos proyectos antes de que ‘quede la escoba en los puertos'”, fustigó la parlamentaria durante su intervención en Enade.

 “No pueden quedarse aislados, no pueden ver los conflictos pasar por sus narices, tienen que influir, no pueden seguir siendo un muro de contención de los dolores de Chile, no más desidia de parte de todo el sistema, incluido el empresariado, no son un espectador, son un actor social más ¿Por qué algunos creen que lo público no es para ustedes?”, reflexionó la parlamentaria.

La parlamentaria, además, llamó al empresariado en general  a conocer a sus trabajadores y a incluir a más mujeres en cargos gerenciales “antes de que vengan las cuotas”.

En relación al momento social, la legisladora resumió que en Chile hay “una izquierda rendida a los extremos, una derecha temerosa y acomplejada, un empresariado desconectado y que mira de lejos, un mundo social más educado y más exigente, un país sin crecimiento”.

Sobe ese último punto, Hoffmann comentó que en los últimos seis años el país solo ha crecido en uno de ellos, por lo que advirtió que no existe una forma de avanzar en materias sociales si la economía no crece.

La diputada, por otro lado, cuestionó a los “Gobiernos  ineficientes llenos de operadores políticos”, además de los abusos del Estado, los que calificó como “peores” que aquellos que cometen las grandes empresas.