Por Redacción PortalPortuario.cl
@PortalPortuario
La consultora británica Drewry ajustó sus proyecciones para el mercado de contenedores, el que tendrá un rendimiento global menor al proyectado para este año.
El escenario se extendería por un horizonte de cinco años, según la consultora.
Drewry -ahora- espera que el rendimiento portuario mundial aumente 2.6% en 2019, por debajo de la expectativa anterior del 3.0% como fue publicado inicialmente en su último Container Markert Annual Review and Forecast 2019/20.
“El peso de los riesgos que presionan al mercado de contenedores parece ser cada vez más pesado cada día”, dijo Simon Heaney, gerente senior de investigación de contenedores de Drewry y editor de Container Forecaster.
“La situación se ha exacerbado por una serie de nuevos problemas que ocultan al mercado en nuevos niveles de preocupación e incertidumbre sobre los que existían anteriormente”, añadió.
Heaney apuntó que “existe el peligro de que esta corriente de noticias negativas cree una profecía autocumplida que podría ser contraria a los hechos sobre el terreno. Las estadísticas portuarias del primer semestre fueron razonablemente sólidas y la demanda de los consumidores había sido bastante resistente, a pesar de todo, pero algunos indicadores clave han disminuido más recientemente y creemos que es correcto adoptar una actitud un poco más cautelosa”.
Uno de los principales riesgos identificados en el informe es el impacto de la OMI 2020 en el suministro de contenedores. Todavía no hay una guía clara sobre cuánto costo adicional tendrá en la industria y los recientes ataques con aviones no tripulados en las instalaciones petroleras sauditas enturbiaron las aguas cuando causaron un aumento en los precios del petróleo, de acuerdo a la consultora.
La estimación actual de Drewry es que los operadores se enfrentarán el próximo año con una factura de combustible adicional de USD 11 mil millones relacionada con el cambio a fuelóleo con bajo contenido de azufre y el grado de compensación que recibirán los transportistas dictará el nivel de interrupción del suministro el próximo año.
“Nuestra suposición de trabajo es que los transportistas tendrán más éxito en recuperar ese costo que antes, hasta el punto de que no habrá una interrupción importante en el suministro”, dijo Heaney.
“Sin embargo, si se quedan cortos por un margen significativo, creemos que las líneas desempolvarían rápidamente el libro de jugadas de una década que se utilizó para superar el colapso financiero global. Los transportistas se centrarán mucho menos en la calidad del servicio y más en la reducción de costos”, complementó.
“En ese escenario, los transportistas tratarán de proteger los flujos de efectivo restringiendo la capacidad lo mejor que puedan, a través de una combinación de medidas, que incluyen más slow steaming, más blank sailings y la contratación de embarcaciones fletadas”, agregó Heaney.
Si no se recupera más de la factura de combustible más grande, también es probable que empuje a más transportistas / propietarios a tener más barcos equipados con depuradores de escape para poder seguir funcionando con el aceite más barato con alto contenido de azufre y / o acelerar las demoliciones.
“Si los eventos siguen este camino, el equilibrio entre la oferta y la demanda será muy diferente de nuestro pronóstico actual. El peor de los casos, cuando la mayoría de las líneas navieras no pueden operar cerca del punto de equilibrio y algunas se enfrentan potencialmente a la bancarrota, en realidad sería una ruta mucho más rápida para reequilibrar el mercado que la ruta actual. Se necesitaría una línea muy valiente para querer un giro de este tipo de eventos, pero para aquellos que podrían estar seguros de pasar por el otro lado, después de un dolor inicial, las recompensas serían mucho mayores”, sostuvo Heaney.
“La mayoría de los cargadores aceptan que tendrán que pagar más, pero con razón esperan que cualquier aumento se justifique con un mecanismo creíble y confiable; en otras palabras, la pelota está muy en la cancha de los transportistas”, concluyó.
