La Administración General de Puertos (AGP) decidió prorrogar por 30 días la bonificación del peaje en la Vía Navegable Troncal (VNT), manteniendo hasta fines de junio el valor bonificado de 1,20 dólares por tonelada de registro neto (TRN) en el tramo Santa Fe-Confluencia, según consignó GlobalPorts.
La decisión, formalizada a través de la Resolución 32/2025 publicada en el Boletín Oficial, evita -de momento- la entrada en vigencia de la tarifa plena estipulada en 1,47 dólares por tonelada, otorgando aire a los operadores logísticos mientras persisten cuestiones técnicas y administrativas sin resolver.
La medida, aunque celebrada en el sector, revela que detrás de la bonificación coyuntural subyace una falta de definición estructural sobre la política tarifaria en la principal vía fluvial de Argentina, clave para el comercio exterior y la integración regional.
El retraso en la constitución de la “Mesa de Trabajo de la VNT – Sección Santa Fe al Norte” ha sido uno de los motivos centrales para justificar esta prórroga. Este ámbito, pensado para revisar la razonabilidad de los valores aplicados en el segmento norte de la hidrovía, aún no ha logrado ponerse en marcha debido al proceso de transición institucional que atraviesa el sistema portuario argentino.
Aunque la Agencia Nacional de Puertos y Navegación (ANPYN) fue creada a comienzos de 2025 como organismo continuador de la Administración General de Puertos Sociedad Anónima Unipersonal (AGP S.A.U.), el proceso de transición institucional aún no está plenamente consolidado. Por eso, la reciente prórroga de la bonificación del peaje en la VNT fue formalizada a través de la AGP S.A.U., que mantiene vigentes ciertas funciones operativas y administrativas mientras se completa el traspaso de competencias a la nueva agencia.
El tramo Santa Fe-Confluencia, también denominado Sección II, es desde 2022 foco de tensiones entre el gobierno argentino y los usuarios de la vía. Armadores, operadores logísticos y hasta gobiernos extranjeros -especialmente Paraguay- han cuestionado la legalidad, la base técnica y el impacto del peaje sobre los costos logísticos y la competitividad regional. Como respuesta, se fueron estableciendo esquemas de bonificación escalonada, prorrogados en varias ocasiones.
“La incertidumbre tarifaria impacta directamente en la planificación de las empresas, que necesitan reglas claras para sostener las cadenas de abastecimiento y exportación”, advierten referentes del sector.
La VNT, como arteria esencial para el transporte de combustibles, productos agroindustriales e insumos industriales hacia y desde Paraguay, Brasil y Bolivia, no puede funcionar eficazmente bajo esquemas transitorios y parches administrativos.
La extensión de la bonificación hasta fines de junio es un alivio temporario. Al mismo tiempo es un síntoma de los problemas no resueltos en la gobernanza y gestión de la VNTl. Cada prórroga, cada resolución de urgencia, evidencia las dificultades de avanzar hacia un diseño tarifario sustentable, respaldado por estudios técnicos y coordinado regionalmente.
El desafío por delante es construir, más allá de las urgencias, una política de navegación fluvial que combine eficiencia, equidad y previsibilidad. Mientras tanto, la economía regional y el comercio internacional siguen navegando en aguas de incertidumbre.