Por Andrés Orrego Siebert

El Puerto de Arica tendrá una nueva transformación ambiental y logística con la operación de granel mineral con contenedores de volteo, lo que no solo aumentará la eficiencia, sino que también erradicará el acompio de estas cargas en el área portuaria frente a la ciudad al trasladarlo a la zona del antepuerto. En ese lugar, de la mano de Impala Terminals, se construirán instalaciones adecuadas para el manejo de estos productos mineros, en su mayoría, procedentes de Bolivia.
Será a partir de marzo que el nuevo operador comience la construcción de una bodega de última generación de 11.117 metros cuadrados cuya inversión superará, de manera inicial, los 15 millones de dólares.
Jorge Cáceres, gerente general de la Empresa Portuaria Arica (EPA), detalló a PortalPortuario los alcances de esta iniciativa público-privada que consideró “tan relevante como el mismo inicio de la conceción del puerto en el año 2004”.
“Tenemos un proyecto muy interesante que vamos a implementar este 2025 que es el manejo de las cargas de granel mineral de forma mucho más amigable con el medioambiente y que nos va a permitir mejorar la eficiencia de la operación portuaria. Lo más importante aquí es el compromiso con la ciudad que estamos asumiendo de eliminar el almacenamiento de minerales en el puerto y trasladarlos a nuestro antepuerto y modificar el proceso de embarque que -hoy- es con correas transportadoras herméticas a contenedores herméticos volteables, lo que nos da la posibilidad de mejorar nuestra eficiencia en tiempos de atención”, indicó Cáceres.

“Esto parte el próximo mes con la construcción, de parte del concesionario Impala Terminals, de un almacén hermético con presión negativa que va a permitir recepcionar, procesar y cargar los minerales directamente en nuestro antepuerto evitando que los camiones transiten por toda la ciudad”, añadió.
En la práctica, el mineral continuará llegando desde Bolivia, específicamente de Cochabamba y La Paz. Las cargas entrarán al terminal vía Ruta 11CH al terminal que está emplazado en el kilómetro 2 del Valle de Lluta en el antepuerto del Puerto de Arica, donde se acopiará en el almacén de última generación y, previo al embarque, el granel se introducirá en los contenedores de volteo o rotainers para su posterior traslado a los muelles.
“La operación en el puerto ahora va a ser mucho más simple, porque esto nos va a permitir atender naves graneleras en cualquier sitio del Puerto de Arica, porque -actualmente- solo las podemos atender en el sitio 5, lo que genera algunas limitaciones en la operación, pero con este nuevo proceso vamos a tener flexibilidad, más rapidez, más eficiencia y menores costos para toda la operativa”, apuntó Cáceres.
“Este es un hito tan relevante que está a la altura del año 2004 cuando se inició la concesión (de TPA). Ha corrido mucha agua bajo el puente y, con el correr de los años, los minerales que bajan desde Bolivia han tenido distintas etapas. Previo a los años 2000, estos minerales se acopiaban al aire libre, luego se remedió ese terreno, se construyó el galpón de Somarco ya cumpliendo las normativas, pero el compromiso del puerto sigue más allá y, con este proyecto, estamos dando un paso significativo ya eliminando el acopio de minerales en el puerto y eso nos llena de orgullo, porque estamos cumpliendo el compromiso de tener un puerto verde y sustentable que es lo que la ciudad también se merece”, profundizó el gerente general de la estatal portuaria ariqueña.
Según las estimaciones, en plena operación del nuevo modelo logístico para las cargas minerales a granel, el Puerto de Arica podrá movilizar 200 mil toneladas, aunque esta cantidad podría aumentar.

“Esto va aumentar la cantidad de embarques, porque el proceso va a ser mucho más rápido. Actualmente, las naves que cargan mineral solo lo hacen en el sitio 5, porque ahí está la correa transportadora hermética, pero ese sitio tiene prioridad para naves con contenedores, por lo que, en ese caso, la operación tiene que ser suspendida para que ingresen ese tipo de naves y eso alarga el proceso varios días o una semana, entonces con los rotainers, se hará todo más rápido y con menos turnos, lo que hará que la capacidad dinámica de acopio aumente y esperamos superar las 200 mil toneladas anuales progresivamente. Están comprometidas 140 mil toneladas que es el piso y, desde ahí, vamos a ir creciendo”, sostuvo Cáceres.
El ejecutivo portuario ariqueño, de la misma manera, aseguró que esta iniciativa podría atraer cargas minerales generadas en el sur del Perú como ya ocurre con otros tipos de importaciones y exportaciones con destino u origen en ese país y que tienen al Puerto de Arica como alternativa por su proximidad, seguridad y continuidad operativa.
En principio, el proyecto se levantará en un área de tres hectáreas con una reserva de tres adicionales. Las obras, que se iniciarán en marzo, concluirán -según el cronograma- a fines de año para iniciar sus operaciones a inicios de 2026.
Junto con las instalaciones en el antepuerto, se incorporarán 420 rotainers para los cuales, el concesionario Terminal Puerto Arica también ha desarrollado inversiones para comprar los spreaders que se requieren para la manipulación de los contenedores de volteo.