Por Redacción PortalPortuario/Agencia Reuters

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, restableció su campaña de “máxima presión” sobre Irán, que incluye esfuerzos para reducir a cero sus exportaciones de petróleo para evitar que Teherán obtenga un arma nuclear.
Antes de su reunión con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, Trump firmó el memorándum presidencial que restablece la dura política de Washington hacia Irán, la que ya se había practicado durante su primer mandato.
Al firmar el memorando, Trump lo describió como muy difícil y dijo que no sabía si tomar la decisión o no. Sostuvo que estaba abierto a un acuerdo con Irán y expresó su disposición a hablar con el líder iraní.
“Para mí es muy sencillo: Irán no puede tener un arma nuclear”, afirmó Trump. Cuando se le preguntó qué tan cerca está Teherán de tener un arma nuclear, Trump respondió: “Están demasiado cerca”.
Trump ha acusado al expresidente Joe Biden de no aplicar rigurosamente las sanciones a las exportaciones de petróleo, lo que, según Trump, envalentonó a Teherán al permitirle vender el carburante para financiar un programa de armas nucleares y milicias armadas en Oriente Medio.
Irán está acelerando “drásticamente” el enriquecimiento de uranio hasta alcanzar 60% de pureza, cerca del nivel de pureza de aproximadamente el 90% necesario para fabricar armas, dijo a Reuters el jefe del organismo de control nuclear de la ONU en diciembre. Irán ha negado que quiera desarrollar un arma nuclear.
El memorándum de Trump, entre otras cosas, ordena al secretario del Tesoro de Estados Unidos imponer “máxima presión económica” sobre Irán, incluidas sanciones y mecanismos de cumplimiento para aquellos que violen las sanciones existentes.
También ordenó al Tesoro y al Departamento de Estado implementar una campaña destinada a “reducir a cero las exportaciones petroleras de Irán”. Los precios del petróleo estadounidense redujeron sus pérdidas el martes 4 de febrero ante la noticia de que Trump planea firmar el memorando, que compensó cierta debilidad por el drama arancelario entre Washington y Beijing.
Las exportaciones petroleras de Teherán sumaron 53.000 millones de dólares en 2023 y 54.000 millones de dólares el año anterior, según estimaciones de la Administración de Información Energética de Estados Unidos. La producción durante 2024 alcanzó su nivel más alto desde 2018, según datos de la OPEP.
Trump había reducido las exportaciones petroleras de Irán a casi cero durante parte de su primer mandato tras volver a imponer sanciones. Estas aumentaron durante el mandato de Biden, ya que Irán logró evadir las sanciones.
La Agencia Internacional de Energía, con sede en París, cree que Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos y otros miembros de la OPEP tienen capacidad disponible para compensar cualquier pérdida de exportaciones de Irán, también miembro de la OPEP.
Cabe mencionar que China no reconoce las sanciones estadounidenses y las empresas chinas son las que más compran el petróleo iraní. China e Irán también han creado un sistema comercial que utiliza principalmente el yuan chino y una red de intermediarios, evitando el dólar y la exposición a los reguladores estadounidenses.
Kevin Book, analista de ClearView Energy, comentó que la administración Trump podría hacer cumplir la ley de 2024 para detener la explotación de petróleo iraní (SHIP) para reducir algunos barriles iraníes.
La ley SHIP, que la administración Biden no aplicó estrictamente, permite la aplicación de medidas en puertos y refinerías extranjeros que procesan petróleo exportado desde Irán en violación de las sanciones.
Book expresó que una medida tomada el mes pasado por el Grupo Portuario de Shandong para prohibir que los petroleros sancionados por Estados Unidos atraquen en sus puertos en la provincia oriental china es una señal del impacto que podría tener la ley SHIP.
Trump también ordenó a su embajador ante la ONU que trabaje con sus aliados para “completar el restablecimiento de las sanciones y restricciones internacionales contra Irán”, en virtud de un acuerdo de 2015 entre Irán y potencias mundiales clave que levantó las sanciones a Teherán a cambio de restricciones a su programa nuclear.
Estados Unidos abandonó el acuerdo en 2018, durante el primer mandato de Trump, e Irán comenzó a alejarse de sus compromisos en materia nuclear en virtud del acuerdo. La administración Trump también había intentado activar una nueva aplicación de las sanciones en virtud del acuerdo en 2020, pero la medida fue rechazada por el Consejo de Seguridad de la ONU.
En diciembre, Gran Bretaña, Francia y Alemania dijeron al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que están listos, si es necesario, para activar nuevamente todas las sanciones internacionales contra Irán para evitar que el país adquiera un arma nuclear.
Irán perderá la capacidad de tomar medidas de ese tipo el 18 de octubre, cuando expire una resolución de la ONU de 2015 que consagra el acuerdo de Irán con Gran Bretaña, Alemania, Francia, Estados Unidos, Rusia y China que levantó las sanciones a Teherán a cambio de restricciones a su programa nuclear.
El embajador de Irán ante la ONU, Amir Saeid Iravani, ha dicho que invocar la “reinicio rápido” de las sanciones contra Teherán sería “ilegal y contraproducente”.
Los diplomáticos europeos e iraníes se reunieron en noviembre y enero para discutir si podían trabajar para desactivar las tensiones regionales, incluido el programa nuclear de Teherán, antes del regreso de Trump.