El diputado PC, Daniel Núñez, solicitó al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) ampliar el plazo de participación ciudadana del proyecto minero portuario Dominga de Andes Iron.
El legislador por Coquimbo, Ovalle y Rio Hurtado explicó que los dirigentes locales, supieron del inicio del proceso 15 días después de su puesta en marcha, lo que dificulta intervenir adecuadamente en el procedimiento.
El parlamentario, asimismo, pidió al SEA mediante un oficio, aumentar la cantidad de talleres de participación ciudadana (PAC) para suplir la demora y llegar adecuadamente a toda la comunidad.
“Nos parece razonable que ante este atraso en el proceso de participación ciudadana, el Servicios de Evaluación Ambiental amplié el plazo para que las comunidad puedan entregar sus puntos de vista, sus opiniones, de manera conveniente. Estamos ante un proyecto de gran connotación y es clave que los higueranos e higueranas puedan incidir en el proceso”, recalcó.
En el documento enviado al SEA, el diputado también expresó la preocupación por la instalación de las faenas de explotación sobre el acuífero de Los Choros.
“Sobre la explotación del mineral directamente sobre el acuífero Los Choros, el cual constituye un reservorio de 7 años de recursos hídricos durante periodos de sequía para el valle Los Choros, famoso por actividades agrícolas como la Olivicultura desarrollada principalmente por pequeños y medianos campesinos, nos preocupan las dudas que caen sobre el modelo de drenaje y reinyección de agua de este acuífero”, expresó.
En relación a la adenda 3 que ingresó la empresa en octubre pasado y que declara una “nueva área de influencia marina”, Núñez manifestó que resulta imposible medir a estas alturas del proceso los impactos que el proyecto podría tener en el mar.
“No es posible evaluar nuevos impactos que el proyecto podría tener en el medio marino. Hay que considerar que este proyecto lleva 3 años en evaluación (ingresado en septiembre de 2013) y recién ahora, en octubre 2016, incorporaron esta nueva área de influencia marina. A esta altura en la etapa final de la evaluación no es posible evaluar nuevos impactos en el medio marino. Nuestra preocupación es justamente la incertidumbre que esta falta de información genera porque no hay certeza de cuáles son los impactos reales que podría tener el proyecto en el medio marino”, detalló.
El proyecto Dominga inició en septiembre de 2013 el proceso para obtener los permisos ambientales para operar, que está a cargo del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA). En octubre de 2016 se presentó la tercera Adenda, que consolida las respuestas a las consultas que hizo la autoridad y la comunidad al Estudio de Impacto Ambiental (EIA).
Dominga contempla la producción anual de 12 millones de toneladas de concentrado de hierro y 150.000 toneladas de concentrado de cobre, como subproducto. La inversión es de USD 2.500 millones y su vida útil es de 26,5 años.