Por Emiliano Galli, Trade News

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La pronunciada bajante del río Paraná no sólo afecta los buques graneleros que parten cargados desde las terminales del polo agroindustrial exportador del Gran Rosario. Las cargas de exportación río arriba; es decir al norte de Santa Fe, donde el calado es menor y cuyo transporte se realiza principalmente en conovoyes de barcazas con remolques de empuje, comenzaron a sufrir también inconvenientes.

En el kilómetro 700 del río, a la altura de La Paz, se repiten los “toques” en los convoyes. Algunas embarcaciones sufrieron rumbos y Prefectura, por precaución, decidió cerrar el canal.

Mientras dure el sumario de investigación, las hipótesis hablan de un “objeto hundido” que ahora se hizo evidente con la bajante, de navegaciones “fuera de canal” o de convoyes que se “llevaron puesta la boya” señalizadora.

Cola de convoyes

“Hay un canal alternativo y los capitanes hicieron relevamientos de seguridad para verificar la navegabilidad y así se lo informamos a Prefectura. Pero todavía no tomaron la decisión de habilitarlo y ya se formó una cola de 18 convoyes. Cada día que pasa con el tráfico interrumpido multiplica las complicaciones logísticas”, advirtió a Trade News un armador con embarcaciones comprometidas.

Por el momento, tampoco se está permitiendo el franqueo mediante la ruptura de los convoyes, fraccionando barcazas y permitiendo el paso, al menos, de a partes.

Al cierre de esta edición, así se encontraba el kilómetro 700 del Paraná a la altura de La Paz, Entre Ríos.
“Ya van dos días con el canal cerrado. Y se está impidiendo el despacho aguas arriba de La Paz. La congestión va en aumento”, manifestaron, tras reconocer que la causa de los siniestros está determinada exclusivamente por la pronunciada bajante del río.

“Estamos entrando en fase de incumplimiento de contratos comerciales. Por eso la presión tanto de los cargadores paraguayos como brasileños para que se permita habilitar el canal secundario”, señaló.

Relevamientos

Consultados al respecto en el área de control de vías navegables de la Subsecretaría de Puertos, Vías Navegables y Marina Mercante, reconocieron el inconveniente y admitieron que desde ayer “se ordenaron relevamientos en la zona porque algunas embarcaciones tocaron y sufrieron rumbos”.

“Evidentemente alguna (formación) se llevó puesta una boya y quedó el canal además sin señalización. Estamos relevando con Prefectura. Mientras, el canal sigue cerrado hasta que saquemos la nueva determinante”, explicaron a Trade News.

Desde Paraguay, el Centro de Armadores Fluviales y Marítimos (Cafym) explicó que son “40 las embarcaciones afectadas”. “Tenemos que pedir que habiliten el canal secundario”, respondieron ante una consulta de nuestro medio asociado.

“El canal secundario cuenta con 12 pies y más de 200 metros de ancho”, subrayaron desde Paraguay los armadores perjudicados, que evalúan remitir cartas a su Cancillería para agilizar el reclamo.