Por Redacción ElVigía.com
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El presidente de Puertos del Estado, Francisco Toledo, prevé un descenso del movimiento portuario derivado de la crisis del coronavirus de entre el 10 y el 16% al cierre de 2020.
Son estimaciones que ha elaborado la dirección de Planificación y Desarrollo del organismo portuario en base a las previsiones económicas de distintas entidades y barajando diferentes escenarios de recuperación según la evolución del PIB y del comercio exterior mundial.
Así, los escenarios optimista e intermedio, que son en los que “nos vamos a mover” con más probabilidad, según Toledo, estiman una pérdida de la actividad de entre el 10% y el 16%, respectivamente.
En el peor de los escenarios, los pronósticos de Puertos del Estado calculan un descenso de los tráficos del 22%.
“Pese a que en este momento resulta muy difícil pronosticar en qué escenario nos vamos a mover, es muy complicado que se produzca el escenario desfavorable, pues estaríamos hablando de una situación crítica a nivel mundial”, ha señalado Toledo durante un webinar organizado por la Generalitat Valenciana.
En este sentido, y teniendo en cuenta que se trata de una crisis de consumo y no financiera, el máximo responsable de Puertos ha indicado que “es posible que oscilemos entre la visión optimista, que supone recuperar el PIB al cabo de un año, y la intermedia, que implicaría recuperarlo en dos”.
De todas formas, en cualquiera de los escenarios planteados, Toledo ha insistido en la importancia de “prepararnos para proteger al sector logístico, que crea mucho empleo y que en esta crisis ha demostrado que es esencial”.
De hecho, ha destacado las medidas que han adoptado desde el Ministerio de Transportes, a través de Puertos, para paliar el impacto de esta crisis, tales como la reducción temporal de las tasas, que supondrá un ahorro de costes de más de 100 millones a las empresas portuarias, el aplazamiento de pago de tasas, que representará una inyección de liquidez de 250 millones, o la agilización en el pago a proveedores. A este respecto, actualmente se está pagando en un máximo de 13 días en todas las autoridades portuarias.
Sobre la posibilidad de mantener la reducción de tasas, Toledo ha señalado que se trata de una medida “coyuntural” y, por tanto, “en función de cómo progrese la crisis valoraremos si se tiene que extender en el tiempo, pero todavía es pronto para valorarlo”.
Además, también se ha referido a los cambios que comportará esta pandemia, tales como una modificación del equilibrio económico mundial, variaciones en las cadenas logísticas, avances en materia de digitalización, romper con las dinámicas insostenibles o la necesidad de cambiar nuestro mix de transporte y de que los grandes tránsitos acaben trasladándose al ferrocarril, entre otras cuestiones.
Hacia un nuevo modelo logístico
En la jornada también han participado Arcadi España, consejero de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Josep Vicent Boira, comisionado del Gobierno para el Corredor Mediterráneo y la eurodiputada del Grupo Socialistas y Demócratas Inma Rodríguez, que han apuntado algunas líneas estratégicas para repensar el futuro del transporte y la logística y buscar nuevos modelos de suministros que no estén tan alejados y permitan una mayor versatilidad para hacer frente a cualquier imprevisto.
En este nuevo modelo, tanto España como Boira han defendido una “globalización más próxima, más regionalizada”. “Eso no significa que se tenga que poner en cuestión la globalización, sino que tenemos que repensarla, volver a una globalización más regionalizada y diversificada, donde podamos tener mayores oportunidades para la industria europea y española”, ha apuntado España, para quien “no tiene sentido que nuestros principales proveedores estén a miles de kilómetros de distancia”.
Por su parte, Boira ha defendido la creación de un “nuevo mapa mental” hacia una “globalización de media distancia, donde los grandes flujos globales van a estar ligados a otros mucho más regionalizados”.
Por otra parte, los expertos apuestan por un reequilibrio de los distintos modos de transporte de mercancías y un impulso definitivo al ferrocarril para luchar contra el cambio climático y disponer de un sistema de transporte eficiente. “Propongo una alianza entre modos de transporte”, ha señalado Boira, que se ha referido a la excesiva dependencia de la carretera que acumula el sistema español, con una cuota de mercado del 95%.
Sin embargo, para Inma Rodríguez, “difícilmente podremos hablar de una globalización regionalizada si no disponemos de una interconexión adecuada en los diferentes modos de transporte. Y el transporte ferroviario desde España hasta Europa deja mucho que desear”. Además, la eurodiputada ha instado a buscar un “equilibrio” entre los distintos métodos, “sin demonizar ningún modo de transporte”.
Por último, Arcadi España aboga por repensar la estrategia única del just in time y por disponer de unas reservas estratégicas de material sanitario y de primera necesidad en espacios como Feria València, lo que garantizaría el suministro de forma permanente en caso de que se produzca otra crisis.