Aunque la investigación recién comienza, es muy probable que estas piezas correspondan a uno de las locomotoras que se utilizaron entre 1910 y 1918 para la construcción del primer puerto de la zona, cuya función era transportar piedras de las canteras del Cerro Panul para los molos.
Así lo cree el conservador y director del Museo de San Antonio, José Luis Brito. “Vamos a iniciar el análisis limpiando estas piezas que tienen mucho óxido, pero de todos modos dejan ver inscripciones en inglés para saber dónde y cuándo fueron construidas. Estas máquinas se siguieron usando post construcción del puerto hasta cerca de 1940 como locomotoras de patio, es decir transferían la carga del buque hasta los trenes que llevaban la carga a Santiago. Es un hallazgo muy valioso que pasará a ser parte del patrimonio de la ciudad”.
“A partir de este descubrimiento estableceremos una estrecha coordinación con el museo, pues es muy probable que sigan apareciendo nuevos vestigios que es vital conservar para la memoria histórica de nuestro puerto”, agregó el gerente de Operaciones de STI, Carlos Gómez.
