Por Emiliano Galli, Trade News
@TradeNewsAr
Antes de que la pandemia decidiera poner en suspenso los planes de todo el mundo, Terminal Puerto Rosario (TPR) continúo con su plan estratégico y desarrollo inversiones por más de USD 2 millones, e incorporó una grúa móvil adicional en uno de sus muelles. También avanzó con el estudio técnico y de ingeniería para la construcción de un nuevo muelle, apto para una profundidad de 40 pies.
“Desarrollamos la puesta en valor de 600 metros de explanada, agregamos una cámara de frío para los cítricos que van a la costa este de Estados Unidos y al norte de Europa, e invertimos más de 2,2 millones de dólares en una grúa Gottwald para dar flexibilidad al line up del muelle de contenedores, habilitando el muelle centro para operar convoys completos de barcazas y la realización de transbordos a buques oceánicos para conectar con todo el Mercosur y dotar de competitividad a los transbordos”, explicó Rodrigo Galleguillos, Gerente General de TPR en diálogo con Trade News.
Adicionalmente en el 2020, se desarrolló el dragado del muelle sur para aumentar el margen de seguridad y mantener la determinante de la hidrovía siempre. “Mientras, seguimos en el proceso de revisión de las futuras inversiones que se basan en nuestro plan estratégico y que seguirán activándose en base a la demanda”, señaló el ejecutivo.
¿Cómo cerraron comercialmente el 2020?
La primera reflexión que surge de 2020 es la del agradecimiento al compromiso de todos los trabajadores y la comunidad portuaria de TPR, porque pudimos asegurar la salud de las personas y la continuidad operativa, e incluso apoyamos a la provincia a la hora de evacuar tripulantes por el Covid-19.
Luego, en un contexto tan complicado, logramos mejorar la productividad y el rendimiento cuando la tendencia en pandemia indicaba justamente todo lo contrario. Nosotros logramos aumentos del orden del 25% en cargas generales y gráneles, y anotamos varios casos de éxito gracias a la revisión de procesos y la inversión en tecnología.
Gracias a las mejoras en los procesos internos, este año se diversificó la matriz de clientes en fertilizantes, con resultados satisfactorios y con oportunidades interesantes de desarrollo.
¿Qué indicadores de esas mejoras puede brindar?
Por ejemplo, en harina de soja aumentamos la productividad en más de un 80% gracias al rediseño operativo de procesos internos. Y en contenedores anotamos también mejoras en el rendimiento que nos llevaron a registrar entre 30 y 32 movimientos por hora. Esto fue algo destacado por nuestros clientes porque incluso en un contexto de baja de contenedores en la Argentina, con una situación compleja para las exportaciones, el balance fue positivo porque mantuvimos un nivel de actividad similar en contenedores al tiempo que logramos diversificar las cargas generales y a granel.
¿Y en qué consistió la mejora de procesos? ¿Fue una decisión local o una política del holding?
Es parte de nuestra política de mejora continua en la que venimos trabajando desde 2019 y en 2020 vimos los frutos.
Diría que fueron similar a los de 2019, lo que es algo satisfactorio por el contexto porque, además, veníamos creciendo y cumpliendo con las proyecciones del potencial. Puerto Rosario maneja unos 70.000 TEU y vemos que podemos ampliar esa capacidad y cantidad de carga porque más del 40% de la carga de la zona de Buenos Aires pertenece al hinterland de Rosario al norte.
¿O sea que crecieron en plena pandemia?
En el decrecimiento de la Argentina el comportamiento de TPR fue anti cíclico por los desarrollos propios y las soluciones sustentables que introdujimos para el cliente. Estimamos que, de no haber tenido un año con pandemia, nuestros niveles de crecimiento en 2020 hubieran rondado el 10 a 15 por ciento.
¿Qué navieras operan en TPR?
Las principales: Maersk y Hamburg Süd, MSC, Cosco, Hapag-Lloyd. Tenemos dos servicios regulares semanales, uno en conexión con Montevideo y el otro con el sur de Brasil, muy competitivos en los mercados de Estados Unidos, norte de Europa y el Mediterráneo.
Además, este año desarrollamos mucho el volumen al Asia y vemos ahí mucho potencial. Los servicios regulares se están cumpliendo plenamente y muchos quieren sacar más carga.
¿Es decir que en contenedores operan con buques y barcazas?
Si, con buques de 2500 TEU y barcazas. Y un tema relevante que vemos con optimismo es el desarrollo de la futura licitación de la hidrovía, para lograr operar buques pospanamax que no aumentan el costo de la recalada pero sí reducen mucho los costos por contenedor.
¿Cómo está el tema intermodal en la terminal?
En este punto estimamos contar con una ventaja competitiva y sustentable en logística e infraestructura. Gracias a ello tuvimos varios casos de éxito en 2020. Por ejemplo, en el primer semestre, el 24% de los movimientos de TPR se hicieron por tren, gracias al acceso bitrocha de la terminal que le permite a todas las líneas férreas conectarse con el puerto.
Tuvimos casos relevantes, como la operación de una formación con más de 100 contenedores con vino desde Mendoza, más los contenedores con cargas de la industria automotriz que van a Córdoba y vuelven con legumbres o maní. Es una solución diferente para productos a granel, como el azúcar orgánico, que se mueve en gran parte por tren. Estamos manejando mucha carga intermodal con barcazas, tren y camión, conectando incluso con Santa Cruz de la Sierra, en Bolivia. Es claramente el camino.
¿Cuáles son los nuevos mercados y cargas que esperan desarrollar, y qué desafíos esperan para 2021?
Todos los nichos relacionados con el Mercosur, con transbordo directo e indirecto de las cargas entre Bolivia, Brasil y Paraguay. Tenemos una amplia ventaja en este sentido por los más de 1600 metros lineales de muelle, que nos posicionan muy bien en costos para operar de manera competitiva las barcazas. Vemos mucho potencial en la conversión de camión a barco, con cargas que antes sólo operaba en el modo terrestre con países vecinos y hoy lo hace de manera fluvial y marítima, lo que permite el desarrollo del mercado de contenedores con un hinterland tan relevante como el de Rosario al norte.
Adicionalmente, continuaremos el desarrollo del mercado de contenedores, estimamos una gran capacidad de crecimiento, donde los clientes demandan por una mayor cantidad de bodega y servicios, lo que nos enorgullece, porque demuestra que nuestra propuesta es valorada y que nos permite tener una mirada optimista en el futuro.
Respecto de los desafíos, estamos asistiendo a la definición de algo muy relevante para la competitividad que es la licitación de la hidrovía, que es un caso de éxito de la Argentina, y presenta una maravillosa oportunidad de cara al futuro. Argentina se merece una hidrovía competitiva con un mejor calado para barcos más grandes a costos competitivos.
¿Siguen de cerca también la licitación del Puerto Buenos Aires y la profundización de Montevideo a 14 metros?
Seguimos la evolución del comercio exterior. Creo que la competencia es sana y tener un puerto competitivo, con calado, favorece el comercio exterior. Esperamos una evolución positiva (de la licitación) y felicitamos a Montevideo también. Pero más allá de cómo evolucionen los puertos metropolitanos, nos preocupamos por desarrollar el mercado interno y por ampliar nuestra capacidad de movimientos de contenedores porque así ahorramos los 600 kilómetros de roundtrip a Buenos Aires para que la carga salga directamente por Rosario.