Por Redacción PortalPortuario.cl
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Durante el último mes, el asistente de inteligencia artificial Stena Fuel Pilot se introdujo en dos buques más de Stena Line, Stena Flavia y Mecklenburg-Vorpommern. De esta manera, ya son siete las naves que cuentan con ese sistema con el objetivo de reducir el consumo de combustible y las emisiones de CO2 en un 5%.
El Stena Fuel Pilot comenzó como un estudio piloto sobre Stena Scandinavica en la ruta Gotemburgo-Kiel en 2018 con la tarea de investigar y explorar cómo se puede usar la inteligencia artificial para ayudar a los capitanes y tripulaciones a bordo a ahorrar combustible y reducir las emisiones de CO2.
El asistente de inteligencia artificial, ahora llamado “Stena Fuel Pilot”, combina inteligencia artificial, experiencia náutica y fuentes de datos como la corriente, las olas, la profundidad, el viento, así como las características de la embarcación y el horario de la ruta. El ahorro conservador de combustible es del 2% y el potencial es superior al 5%.
En total, 7 buques Stena Line en Escandinavia, Alemania y el Mar Báltico ahora operan con asistencia de IA y la compañía planea un despliegue en toda la flota. Los dos últimos que introdujeron el asistente de inteligencia artificial a bordo fueron Mecklenburg-Vorpommern en la ruta Trelleborg-Rostock y Stena Flavia, que actualmente opera en Nynäshamn-Ventspils.
“Estamos trabajando duro para reducir nuestro consumo de combustible y nuestras emisiones, mientras que al mismo tiempo exploramos los combustibles y las tecnologías del mañana. Los principales impulsores de la reducción de emisiones en 2020 son que hemos introducido tres nuevos buques energéticamente eficientes en el Mar de Irlanda”, dijo Erik Lewenhaupt, Jefe de Grupo de Sostenibilidad en Stena Line.
“También hemos introducido electricidad costera renovable durante las escalas en los puertos de Kiel y en total siete barcos de la flota han sido equipados con el asistente de inteligencia artificial Stena Fuel Pilot para ayudar a nuestros capitanes a operar los barcos de la manera más eficiente en energía”, agregó.
En 2020, Stena Line continuó reduciendo sus emisiones totales de CO2 y está diez años por delante de los objetivos de reducción de emisiones de transporte marítimo internacional de la OMI.
El uso de inteligencia artificial a bordo es una de las cuatro áreas clave que Stena Line ha identificado para reducir las emisiones de dióxido de carbono en un 30% para 2030, con el fin de lograr el ambicioso objetivo de estar completamente libre de fósiles para 2050.
Las otras áreas clave son la electrificación de la operación portuaria y de buques, aumentar el uso de combustibles alternativos como el metanol y el hidrógeno, así como la modernización de la flota existente, así como la introducción de nuevos buques eficientes como los cinco buques E-Flexer que se introducirán en 2020-2022.