El transporte por la hidrovía Paraná – Paraguay puede alcanzar en los próximos tres años las 20 millones de toneladas de producción agroindustrial y minera de Brasil, Bolivia y Paraguay, lo que a valores actuales significan ingresos por USD 10o millones para el Puerto de Rosario.
Según información que recoge agencia Télam, la cifra surge de las estimaciones realizadas por un grupo de expertos que se congregó en Rosario para participar del Primer Encuentro de Comercio y Logística para impulsar el desarrollo de la producción en el ámbito de la Hidrovía, que organizó la Bolsa de Comercio rosarina.
De acuerdo con los analistas allí reunidos, la Hidrovía, que en 2015 transportó 15 millones de toneladas en conjunto, puede alcanzar entre este año y 2018 las 20 millones de toneladas, e incluso llegar a duplicar ese número en pocos años más, si prosperan los planes de incremento en la capacidad de explotación de dos yacimientos de mineral de hierro y manganeso, uno en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia; y otro en Corumbá, Brasil, ambos muy próximos al río Paraguay.
Actualmente, la operación de descarga en el puerto de las barcazas que llegan por la Hidrovía, su almacenaje en silos, y la carga en la misma terminal para su exportación cuesta u$s 5 por tonelada, lo que a valores actuales da como resultado u$s 100 millones de ingresos al complejo portuario rosarino, si se consigue capturar la totalidad de lo transportado.
“Este caudal de mercadería podría llegar a ser captado en el futuro por las terminales portuarias de nuestra zona. Esto dependerá de las estrategias comerciales de las industrias oleaginosas y mineras, y de las empresas comercializadoras que operan en el Gran Rosario, en Bolivia, Brasil y Paraguay”, explicó a Télam Julio Calzada, director del Departamento de Informes y Estudios Económicos de la Bolsa de Rosario, quien consideró que “los puertos de Rosario tienen capacidad ociosa como para capturar la carga de la Hidrovía”.
En Bolivia, en el departamento de Santa Cruz de la Sierra, está localizado el yacimiento de hierro y manganeso del Cerro Mutún, considerado el más importante a nivel mundial, y ubicado a sólo 27 kilómetros de Puerto Suárez sobre el río Paraguay, con lo cual la Hidrovía emerge como la salida natural de estos productos hacia los mercados europeos.
Este yacimiento tiene una reserva estimada de 40.000 millones de toneladas de hierro, y 10 mil millones de toneladas de manganeso.
En enero de este año, la empresa china Sinosteel Equipment se adjudicó el proyecto de instalación y construcción de la Planta Siderúrgica Integrada del Mutún, que deberá estar lista dentro de 30 meses y procesaría inicialmente 650 mil toneladas de hierro y 150 mil toneladas de acero a partir de 2018.
Al respecto, Calzada remarcó que “hay excelentes posibilidades de que el mineral de hierro boliviano baje por la Hidrovía Paraná-Paraguay y crezcan las cargas en los puertos argentinos”.
Otro producto que los puertos rosarinos pueden capturar además del hierro es la soja de Bolivia, cuya salida por la Hidrovía en 2015 alcanzó a 942.000 toneladas de harina y aceite.
Sin embargo, la terminal rosarina recibió menos de un tercio de esa carga: 309.000 toneladas de mercadería del complejo sojero boliviano, compuesta por 260 mil toneladas de harina y pellets y casi 49 mil toneladas de aceite, según el Ministerio de Agroindustria de Argentina.
La Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo de Bolivia en su anuario 2015 informó que esta nación registró exportaciones del orden de 1.609.609 toneladas de harina y pellets de soja y 388.971 toneladas de aceite.
El Instituto Nacional de Estadísticas de Bolivia precisó que 47% de las exportaciones del complejo sojero de ese país sale por vía fluvial.
Son cerca de 942.000 toneladas de harina y aceite de soja, de las cuales 309 mil toneladas llegaron al Gran Rosario en 2015, con lo cual cerca de 632.000 toneladas viajaron a otros puertos.
En tanto, hay unas 698.000 toneladas que salen por Desaguadero, en las proximidades del Lago Titicaca, con destino a puertos peruanos; y el resto, unas 335.000 toneladas de exportación sojera de Bolivia, salen por el puerto chileno de Arica.
En consecuencia, el Gran Rosario estaría despachando cerca del 30% de las exportaciones bolivianas de soja y sus derivados, a través de la Hidrovía, mercadería que sale principalmente de dos terminales portuarias bolivianas ubicadas sobre el Canal Tamengo, sobre el Río Paraguay, y de esta forma las barcazas llegan con harina y aceite de soja boliviano hasta los puertos argentinos y uruguayos.