La Aduana de Países Bajos decomisaron 3.279 paquetes de cocaína avaluados en 266 millones de dólares en el Puerto de Vlissingen, los cuales estaban escondidos en un cargamento de plátanos procedentes de Ecuador.

Tal como indica NL Times, la droga fueron recogidos y destruidos en el mismo día por la Aduana y la Policía Portuaria.

Tras la incautación, las autoridades aumentaron la vigilancia en la zona portuaria.

Con respecto a la carga de plátanos, estaba destinada a una empresa de Países Bajos, que según el Ministerio Público no está implicada en el tráfico de drogas.