La Guardia Costera japonesa, en conjunto con la Junta de Seguridad del Transporte de Japón están investigando por qué el car carrier japonés Suou encalló y corría peligro de hundirse mientras viajaba en un mar en calma y con un clima despejado.
Según indica Maritime Executive, el navío había cargado aproximadamente 100 automóviles en el sur de Japón, saliendo del Puerto de Hakata y se dirigía al Puerto de Iwakuni, sin embargo encalló cerca de Matsuyama.
Mientras el barco estaba escorando, el capitán del barco ordenó a los tripulantes evacuar a las balsas salvavidas, posteriormente, la Guardia Costera los recató sin inconvenientes.
Después de mantenerse navegando a la deriva, los equipos de salvamento aseguraron el buque y lo remolcaron hasta la bahía de Kodomari, con la intención de vararlo en aguas poco profundas para evitar que se hundiera.
Finalmente, la Guardia Costera cree que el navío chocó con una roca cerca de la Isla Nuwa.