Presidente de Corma pide aplicar protocolos de infraestructura crítica para retomar operaciones de Puerto Coronel

Por Andrés Orrego Siebert

@PortalPortuario


El presidente de la Corporación Chilena de la Madera (Corma), Juan José Ugarte, advirtió que el paro de más de 40 días que tiene lugar en Puerto Coronel agrava, particularmente, la crisis que atraviesa el sector forestal chileno que ha perdido impulso debido materias de inseguridad. Al respecto, el dirigente gremial pidió a las autoridades aplicar protocolos de infraestructura crítica para despejar accesos y vías férreas, lo que permitiría retomar las faenas.

De acuerdo a Ugarte, el conflicto en el principal puerto exportador de productos madereros está dando un golpe, además, a 40% de las empresas del rubro -en su mayoría pequeñas y medianas- que no han podido despachar sus envíos al exterior.

El timonel de Corma dijo a PortalPortuario que, mensualmente, el sector forestal es el responsable de enviar productos valorados en unos 500 millones de dólares y que, ante el paro en Coronel, solo las grandes empresas han podido desviar cargas a los puertos de la Región de Valparaíso, generando un problema de sobre stock que se complicaría, todavía más, a raíz de la falta de instalaciones de bodegaje y extra portuarias en la Región del Bio Bio.

El dirigente gremial, en este sentido, afirmó que existe un abandono de las autoridades en relación a poder despejar las vías y terminar con los bloqueos de calles y también de la vía férrea, lo que impide el libre tránsito de las cargas, así como de trabajadores portuarios que quieren retomar sus labores en el terminal coronelino.

“La industria maderera nacional es reconocida internacionalmente por sus estándares ambientales, la calidad de sus productos y la seriedad de su oferta, siendo un pilar del desarrollo sostenible de Chile, pero hoy día está viviendo una verdadera crisis con una disminución de la superficie de plantaciones por temas de seguridad como usurpaciones, robos, atentados, incendios intencionales. Se han tenido que cerrar más de 200 aserraderos, hay cinco plantas industriales que han tenido que detener faenas o, al menos, detener turnos por falta de abastecimiento, se han perdido sobre 32 mil empleos asociados al mundo forestal que duplica el encadenamiento económico de las regiones donde opera, por lo tanto es una afectación estructural de toda la economía. Esta circunstancia está, particularmente, agravada por un déficit en el tema logístico y de infraestructura y, muy particularmente, con lo que está viviendo Puerto Coronel que ya lleva más de 40 días de paralización de la actividad portuaria en el principal puerto de exportaciones forestales del país”, afirmó Ugarte.

“Esto implica que la pequeña y mediana industria, por el valor agregado de sus productos, no tiene alternativas de redireccionar a los puertos de la Región de Valparaíso y, por lo tanto, hay un stock de salida de productos que está siendo retenido, se impide el acceso a los trabajadores que están disponibles para volver a tomar actividad y las líneas de ferrocarriles están interrumpidas con barricadas y fuego. Vemos que se está afectando la infraestructura crítica de la Región del Bio Bio, afectando todo el sistema productivo, tanto de abastecimiento como de despacho de productos de exportación sin intervención efectiva de la autoridad. Necesitamos que la autoridad active los protocolos de infraestructura crítica y reponer el tránsito ferroviario para acceso al puerto y la movilidad en la región”, explicó.

“Lo que nosotros visualizamos es que no podemos ingresar al puerto con nuestros productos. La gran empresa tiene alternativas, pagando costos inmensos, de derivar parte de sus cargas hacia los puertos de la Región de Valparaíso, pero el pequeño y mediano productor está con una dificultad de acceso de abastecimiento y salida de productos de exportación. Se está afectando a la infraestructura crítica de la Región del Bio Bio, se está afectando al empleo, la capacidad de desarrollo y de, incluso, abastecer a la industria local. Vemos un abandono de la autoridad de esta situación cuando estamos hablando de infraestructura crítica, de corte de caminos, carreteras, trenes, de impedir el acceso a trabajadores que quieren volver a retomar labores en Puerto Coronel, por lo que necesitamos un actuar decidido de parte del Estado para reponer el acceso, habilitar las líneas férreas y tener al principal puerto de exportación del Bio Bio en plena actividad. Esto no da para más”, profundizó.

Políticas públicas

Juan José Ugarte también se refirió a la ausencia de políticas públicas que han contribuido a que el sector forestal retroceda y que las inversiones de las grandes compañías terminen ejecutándose fuera del país.

“Los países vecinos, Uruguay, Brasil, Argentina, Perú están desarrollando una industria forestal basado en las competencias, capacidades y hoy día recursos chilenos, cuando en el país esto es una teoría inconclusa que no solo no avanza, sino que retrocede. Vemos una ausencia de políticas públicas, un impulso en inversiones asociadas a infraestructura y logística que no se ha concretado y eso hace que Chile pierda competitividad. Seguimos produciendo madera de calidad, con productos muy reconocidos a nivel internacional. Somos el país número 10 en exportaciones forestales, pero ese es un privilegio que podemos perder frente a la competencia regional y, por lo mismo, tenemos que actuar con decisión, con coraje para reinstalar las capacidades forestales en el país. Tenemos 1 millón de hectáreas de suelo de actitud forestal en proceso de erosión y ni siquiera se ha terminado la tarea que se inició hace 50 años con el impulso al sector forestal como una actividad de inversión público-privada”, profundizó.

Inseguridad

El presidente de Corma, por otra parte, entregó cifras relacionadas a la inseguridad que aqueja a las empresas forestales, detallando que existen 102 mil hectáreas usurpadas, 61% de incendios intencionales que han quemado un tercio del patrimonio de plantaciones del país en una década.

Según Ugarte, en los últimos 10 años se han anotado más de 400 atentados contra trabajadores y maquinaria, a lo que se suma el robo de madera que, en los tres años más recientes, totalizó un valor de 167 mil millones de pesos. “El eje de la inseguridad es, claramente, algo que ha afectado al corazón de la industria forestal”, remarcó.


 

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