El fiscal federal Claudio Kishimoto, a cargo de la Fiscalía Federal N°2 de Rosario, denunció al buque responsable de derramar fluidos oleosos en el agua del río Paraná, frente al Campo de la Gloria, mientras estaba amarrado en el Puerto de Vicentin, Argentina.
El incidente tuvo lugar a la altura del kilómetro 345 de la vía fluvial y tuvo como culpable al granelero Princess Maria, el que se encuentra registrado bajo el pabellón de Islas Marshall. La Prefectura Naval de Argentina procedió a retener al navío, según consignó el medio SL24.
Por este caso hay una investigación que es impulsada de oficio por el fiscal federal Claudio Kishimoto. En la misma se busca esclarecer el vaciado de la sentina de la nave, un compartimento ubicado debajo de la sala de máquinas donde se acumulan aguas residuales mezcladas con hidrocarburos, aceites y otros derivados del petróleo.
Las autoridades y las empresas involucradas no se han referido al tema. Además de los potenciales daños ambientales, este tipo de incidentes también genera demoras en la logística del transporte de granos, con el consecuente impacto económico.
Tras la investigación, la Justicia deberá determinar si el vaciado de la sentina fue producto de un acto negligente o una maniobra deliberada.
Igualmente, se cuestiona a las autoridades de la Prefectura de San Lorenzo sobre los controles realizados a las embarcaciones que arriban a la zona y amarran en el puerto. Se investiga el motivo del fallo en los protocolos de contención para prevenir un incidente de esta magnitud.