Por Redacción PortalPortuario / Agencia Reuters
@PortalPortuario
El ministro de Relaciones Exteriores de Panamá, Javier Martínez-Achá, afirmó que el buque petrolero recientemente interceptado por Estados Unidos, que navegaba bajo bandera panameña, no respetó las reglas marítimas del país y desconectó su transpondedor mientras transitaba fuera de aguas venezolanas con un cargamento de crudo.
El canciller agregó que Panamá tomaría las medidas correspondientes, aunque no entregó más detalles. El caso corresponde a la segunda incautación de un navío transportador de petróleo relacionado con el país sudamericano que concretan las fuerzas estadounidenses, que se registró el pasado sábado 20 de diciembre.
En concreto, el buque Centuries fue capturado por la Guardia Costera de Estados Unidos en aguas internacionales. La secretaria de Seguridad Nacional estadounidense, Kristi Noem, sostuvo la nave trasladaba petróleo no autorizado, mientras que el barco operaba como parte de la flota fantasma o en la sombra venezolana.
“Era un barco con bandera falsa que operaba como parte de la flota sombra venezolana para traficar petróleo robado y financiar al régimen narcoterrorista de Maduro”, señaló Noem.
El hecho ocurrió días después de que el Presidente estadounidense, Donald Trump, anunciara un “bloqueo” de todos los petroleros sancionados que entran y salen de Venezuela.
“Estados Unidos continuará persiguiendo el tráfico ilícito de petróleo autorizado que se utiliza para financiar el narcotráfico en la región. Los encontraremos y los detendremos”, señaló la funcionaria.
Por su parte, el Gobierno venezolano calificó la interceptación del petrolero como un “grave acto de piratería internacional” y señaló que el país “denuncia y rechaza el robo y secuestro de una nueva embarcación privada transportadora de petróleo, así como la desaparición forzada de su tripulación, cometidos por personal militar de los Estados Unidos de América en aguas internacionales”.
En tanto, China afirmó que la incautación de buques de otro país por parte de Estados Unidos fue una grave violación del derecho internacional. En la misma línea, señaló que Venezuela tiene derecho a desarrollar relaciones con otros países y recalcó que el gigante asiático se opone a todas las sanciones que considerara unilaterales e ilegales.













































