
El fuerte sismo que afectó a la provincia peruana de Trujillo -de magnitud 6,2 según el USGS y 6,0 de acuerdo con el Instituto Geofísico del Perú (IGP)- durante la noche del sábado 27 de diciembre provocó la caída de grandes rocas que llegaron hasta Salaverry Terminal Internacional.
Según el IGP, el epicentro del movimiento telúrico se situó en el Pacífico, frente a la costa de Chimbote, en el Departamento de Áncash y se registró a 52 kilómetros de profundidad, consignó El Comercio.
Tras reportarse el desprendimiento de las rocas en el recinto portuario, personal de la Defensa Civil y autoridades del municipio se dirigieron a la instalación para revisar la estabilidad del cerro y descartar la posibilidad de nuevas caídas que pudieran poner en riesgo la vida de los trabajadores.
De acuerdo con las informaciones, el suceso no dejó personas lesionadas en el terminal marítimo de Salaverry y tampoco resultó afectada la infraestructura principal del puerto. Sin embargo, se activaron protocolos de seguridad preventivos.
Las autoridades locales señalaron que las operaciones al interior de Salaverry Terminal Internacional se mantienen con normalidad. El acceso a las zonas cercanas al cerro fue restringido, mientras se desarrollan las evaluaciones técnicas correspondientes para descartar riesgos.













































