“Mantenemos el avance de los trabajos y nuestros compromisos con nuestros proveedores y subcontratistas en un clima de absoluta normalidad”, fue la respuesta de Grupo Unidos por el Canal (GUPC) en torno a la carta interna filtrada a los medios de comunicación, donde la empresa Salini-Impregilo advertía que la falta de liquidez podría ser un problema para la culminación de la obra.
La misiva – según informa Estrategiaynogocios.com – que lleva la firma de Pietro Salini, máximo representante de la compañía, pide que se envíe una nota de intención de suspensión o ralentización de las obras de ampliación del Canal de Panamá.
GUPC, consorcio a cargo del diseño y construcción de las nuevas esclusas del canal ampliado, está conformado por Sacyr de España, Salini-Impregilo de Italia, Jan De Nul de Bélgica y Constructora Urbana, S.A. (CUSA) de Panamá.
En una comunicación del consorcio dada a La Estrella de Panamá , manifestaban que el reciente hito de instalación de las últimas compuertas demuestra el compromiso de Grupo Unidos por el Canal con el proyecto, cumpliendo con los diferentes pasos del proceso constructivo.
Luego de completarse la instalación de las 16 compuertas, las siguientes etapas previstas para los próximos meses contemplan la inundación de las cámaras de las esclusas en el Atlántico, antes de dar paso a las primeras pruebas de operación.