Mediante un hecho esencial enviado a la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS), la Pesquera Camanchaca dio a conocer que perdió la concesión que mantenía en el Puerto de Iquique, lugar donde -desde 1962- operaba una planta de procesos.

La concesión revocada por la Empresa Portuaria de Iquique data de 1994 y concluyó en 2004, momento en que comenzó a prorrogarse, en primera instancia, por un decenio y luego por periodos cortos de un año a la espera de que dichos espacios sean otorgados a un nuevo concesionario.

Lo anterior estaba relacionado con el proceso fallido de licitación del molo, sector que  quedó dañado por los efectos de los terremotos del 1 y 2 de abril de 2014.

“El 1 de abril de 2014 se verificó un sismo que afectó el norte del país, lo que suspendió las operaciones en el el Molo del puerto de Iquique, mas no la planta de Camanchaca, la que siguió funcionando normalmente. En el mes de diciembre de 2014, la Empresa Portuaria de Iquique declaró desierto el proceso de licitación de la explotación del Frente de Atraque número uno. Camanchaca presentó en el mes de marzo un estudio de compatibilidad de las actividades pesqueras e industriales, con las etapas que en el futuro pudiesen contemplar las labores de reconstrucción del Molo, solicitando una prórroga de cinco años de la concesión”, indica Camanchaca en el hecho esencial.

La pesquera agrega que su pedido de extensión de concesión fue rechazado por el puerto “mediante carta de fecha 7 de abril de 2015 y de conformidada lo estipulado en la cláusula tercera de la prórroga, EPI le comunicó a Camanchaca su intención de poner término al contrato”.

Ante ese escenario, la pesquera presentó alternativas para mantener sus operaciones en el sector, compatibilizando la actividad pesquera e industrial. Sin embargo, la portuaria estatal rechazó la solicitud.

Camanchaca indica que, a partir de este escenario, hará todas las gestiones para asegurar la continuidad del procesamiento de pesca, sus capacidades de uso de sus licencias pesqueras y la mantención de las fuentes de trabajo para sus empleados, contratistas y proveedores.

La pesquera posee una flota de 15 barcos y es titular de Licencias Transables de Pesca Clase A que le permiten capturar anchoveta, sardina española y jurel en las pesquerías de la zona norte de Chile.