Con la nueva huelga de trabajadores en la terminal de Wilhemshaven, en Alemania, diversos transportistas han comenzado a revisar los horarios de los buques debido a los retrasos esperados por la paralización.

Bajo este contexto, estas huelgas de advertencia ocurrieron tras negociaciones del convenio colectivo de trabajo entre las terminales y los sindicatos que fracasaron y provocaron la paralización de los trabajos en la Terminal de Contenedores de Wilhemshaven (CTW), sin embargo, ya hay una nueva fecha para la próxima ronda de negociaciones, señaló el medio The Loadstar.

En detalle con las negociaciones, el sindicato exige un aumento salarial de 3 euros por hora a partir del 1 de junio, así como el correspondiente incremento de las bonificaciones por turno y un plazo de 12 meses para el nuevo convenio colectivo. 

Con respecto a las líneas navieras, Maersk estaría revisando la alineación y los horarios de sus navíos, así como el impacto de esta huelga en las salidas de los barcos.

“Estamos estudiando la posibilidad de adoptar medidas adicionales, como desvíos o restricciones en el número de movimientos, para minimizar el impacto en los cronogramas de los buques siguientes y, en consecuencia, los retrasos en la carga de nuestros clientes”, declaró la empresa.

Asimismo, la naviera advirtió que incluso después de que se reanuden las operaciones en CTW, los retrasos y congestión en las salidas todavía se podrían mantener.