Siguiendo un riguroso plan de señalización marítima, cada cinco años la Armada de Chile realiza el mantenimiento de Boyas Pilares, necesarias para la navegación segura de todo tipo de embarcaciones en los canales de Chile.

Según informó la institución naval, este tipo de infraestructuras poseen pesos de entre 25 y 30 toneladas que se ubican en el fondo del mar, por lo que su extracción, mantención y reinstalación consideran trabajos de gran envergadura, realizados por el Buque Boyero BRS “Ingeniero Slight”, dependiente de la Quinta Zona Naval, con puerto base en Puerto Montt.

Esta unidad recaló a Punta Arenas esta mañana tras 12 días de navegación por el área norte de la jurisdicción de la Tercera Zona Naval, período durante el cual removió 4 boyas pilares situadas en Angostura Inglesa y Canal Grey, además de seis boyas convencionales en Bahía Molyneux y Canal Santa María.

De acuerdo a la Armada, el periplo no estuvo exento de dificultades meteorológicas, ya que en el trayecto experimentaron vientos de hasta 60 nudos, equivalentes a alrededor de 100 kilómetros por hora.

El total de trabajos de señalización marítima que deberá realizar en las aguas magallánicas, contempla seis boyas pilares y 9 convencionales, para lo cual la dotación y las capacidades del buque se someten a una fuerte carga de trabajo. “Somos uno de los pocos buques que tienen esta capacidad y nuestra dotación tiene un alto nivel de entretenimiento y especialización para cumplir con estas faenas en situaciones climatológicas adversas”, indicó el Comandante del Buque, Capitán de Corbeta Pablo Pérez.

Las boyas pilares son confeccionada de acero, y se caracteriza por su gran tamaño y soportar máximas condiciones de viento, fuertes olas, bajísimas temperaturas, lluvias copiosas y otros factores climáticos del área austral. Además, cada boya está confeccionada para un punto específico de fondeo, considerando vientos promedios, oleaje, etc. Su altura se determina de acuerdo a la profundidad de su punto de instalación. En términos generales, la Boya Pilar debe considerar una escora máxima de 15 grados y el peso oscila entre 4 y 7 toneladas, con pesos muertos de hasta 30 toneladas.

La Tercera Zona Naval cuenta con un total de1300 señales marítimas desplegados por canales y pasos magallánicos que permiten entregarle seguridad a los navegantes que surcan los mares australes.