La Junta Directiva de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) autorizó a la Administración a convocar a fase de precalificación a aquellas empresas interesadas en participar de la licitación internacional de la concesión de un puerto de trasbordo de contenedores en Corozal.
Esta terminal portuaria es considerada el primer proyecto estratégico del país, con miras a aprovechar el potencial de la ruta, a partir de la apertura de la ampliación del Canal en el año 2016.
El administrador del Canal, Jorge Luis Quijano, informó que a principios del mes de noviembre, 13 empresas expresaron de manera formal su interés en desarrollar y operar el puerto de Corozal. “La concesión se otorgará posterior a un proceso de licitación transparente y participativo, que garantizará el mejor rendimiento posible para el Canal de Panamá y por ende para el país”.
Luego de la precalificación, el cronograma de ejecución del Puerto de Corozal contempla la publicación del pliego de cargos y la licitación, con un periodo previo de consultas y tiempo suficiente para que las empresas interesadas formulen sus respectivas propuestas.
La decisión de desarrollar el puerto fue precedida por más de dos años de estudios, que avalaron su viabilidad financiera y operacional. Dichos análisis incluyeron simulaciones con equipos de última generación, con la participación de pilotos supervisores nacionales, de la ACP y extranjeros independientes, que confirmaron que el área contemplada para la operación de la terminal es adecuada para maniobras seguras de giro de los buques Neopanamax.
También se han hecho simulaciones de tráfico de buques en el cauce, las cuales demostraron que se puede mantener los flujos de tránsito del Canal, al tiempo que se atiende las necesidades de los puertos en el Pacífico. Hay que resaltar que la ACP contrató el ensanche adicional del Cauce de Acceso del Pacífico, lo que aumentará la capacidad de tránsito desde y hacia el fondeadero del sur.
Asimismo, el proyecto incluirá entre sus requisitos, el desarrollo de terminal “verde”, con muros perimetrales antiruido y equipamientos eléctricos que no producen emisiones contaminantes, además de otros elementos de mitigación que sugiera el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) que se adelante. Todas las medidas de mitigación que indique el EIA serán parte del pliego de cargos de la licitación del proyecto del puerto que el concesionario tendrá que incorporar en su propuesta y luego en su ejecución.
Durante el periodo de construcción de dos años, el proyecto generará 1.300 plazas de empleos, y cuando esté en operación, deberá producir hasta 2,600 plazas de trabajo permanentes. Además, el Canal recibirá ingresos por el uso de los terrenos, el espejo de agua de los muelles, movimientos de contenedores, y de otros servicios complementarios que se puedan ofrecer a los buques que utilicen el puerto de Corozal.
Para la terminal se contempla la utilización de un globo de terreno propiedad del Canal, adyacente a una de las principales vías de navegación del mundo, por la cual transitan más de 14.000 buques anuales. Los terrenos de Corozal tienen una vocación de uso marítimo con acceso a los puertos del Atlántico por medios de transporte terrestre.
Estudios recientes descartaron la opción de desarrollar el puerto en Farfán, por ser terrenos propiedad de terceros, y que dicho concepto de puerto dependía de rellenos provenientes de materiales excavados o dragados de la ampliación del Canal, que ya fueron depositados en otros puntos, y de la construcción de costosas conexiones ferroviarias sobre el Canal.
Las economías de escala que ofrecerá el Canal ampliado generarán un emplazamiento de buques de mayor tamaño, lo que a su vez optimizará las redes de transporte de las navieras. El proyecto del Puerto de Corozal será un componente fundamental en el desarrollo del conglomerado logístico del país, que a la vez agrega valor a la ruta interoceánica, pilar de la economía panameña.
