Por Redacción PortalPortuario.cl
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Avanza la construcción de la nueva terminal de celulosa en el muelle del Porto de Paranaguá, que inició en junio de 2021 y se espera que esté terminada en el segundo semestre de este año, por lo que la primera operación a través del almacén pasar en diciembre.
La inversión es de R$ 120 millones, realizada por Klabin, fabricante de celulosa, unidad industrial en Telêmaco Borba, en Campos Gerais.
El área de 27.530 metros cuadrados fue adquirida por la empresa en una licitación realizada por Portos do Paraná en agosto de 2019. El contrato de concesión se firmó a principios de 2020, poniendo fin a dos décadas sin nuevos contratos de arrendamiento en el Puerto de Paranaguá. El contrato de exploración del área es por 25 años, renovable por otros 45 años.
Para el director general de Portos do Paraná, Luiz Fernando García, la obra, además de ser un hito para el Porto de Paranaguá, también es una referencia por su agilidad y calidad.
“Tenemos la confianza de una gran empresa para invertir cerca de R$ 120 millones en el Porto de Paranaguá, generando empleo, ingresos y dando utilidad a un área que, hasta entonces, no estaba operativa”, expresó.
Esta inversión, según Luiz Fernando García, fue atraída principalmente por el hecho de que los puertos de Paraná son una opción logística eficiente.
“Klabin, una gran empresa, espera que esa eficiencia se refleje en una ventaja comercial. Nuestra obligación es colaborar en el desarrollo de los trabajos y procurar que las operaciones se realicen con la mayor eficiencia posible, ya sean de recepción de carga por vía terrestre o embarque en el buque”, sostuvo el ejecutivo.
En la etapa actual, la obra emplea alrededor de 180 trabajadores de las más diversas funciones de la construcción. Sandro Ávila, de Klabin, explica que es un conjunto de factores e iniciativas que garantizan la agilidad del trabajo. Uno de los factores que destaca es la autorización recibida de la administración portuaria y de la Receita Federal de Brasil para el acceso privado exclusivo a la obra.
Tanto la obra como la operación prevén altos niveles de sostenibilidad. Durante la construcción, por ejemplo, la empresa optó por un hormigón con malla de hierro.
Además, en la nueva terminal ya se están instalando paneles solares, con energía fotovoltaica capaz de garantizar el autoabastecimiento en consumo propio, y se han realizado aberturas en el techo para garantizar la claridad y reducir el consumo de energía en los momentos más luminosos del día.
Un proceso que ahora está comenzando a ganar impulso es el de las aduanas. Según Ávila, la empresa ya cuenta con todo el circuito de TV y seguridad, con cámaras de cine, servidores espejados, como exige la Receita Federal, según normas ISPSCode.
