Dos funcionarios de aduanas del Puerto de Amberes fueron amenazados por individuos armados, señalados como miembros de bandas narcotraficantes. El ataque tuvo lugar cerca de un puesto del servicio fiscalizador, razón por la cual los sindicatos aduaneros exigieron que se tomen medidas tanto para proteger al personal como para destruir rápidamente las drogas.

En línea con lo informado por el medio belga RTBF, los delincuentes habrían estado buscando un lote de estupefacientes incautado unos días antes. Los sospechosos treparon la valla de un hangar para intentar recuperar la cocaína incautada.

En el momento de la intrusión, dos estibadores estaban trabajando en el hangar. Los delincuentes, armados con un cuchillo, los amenazaron y los ataron.

“De hecho, amordazaron a dos estibadores para que pudieran hacer su trabajo pacíficamente y recuperar la droga”, explicó Johan Lippens, representante del sindicato CSC-Servicios Públicos. Parte de la droga fue recuperada por los antisociales, según dio a conocer Lippens.

En las últimas semanas se han realizado importantes incautaciones de droga, pero con ellas las aduanas viven un aumento de la violencia y de los traficantes que no dudan en intentar robar los cargamentos.

Es así como, a mediados de octubre, la policía local de Amberes impidió que siete holandeses fuertemente armados robaran un cargamento de 10 toneladas de cocaína que había sido incautado.

Los sindicatos y los empresarios exigen una mayor seguridad. “Necesitamos más personal y más seguridad “, acotó Johan Lippens, “a veces sólo hay 2 o 3 funcionarios de aduanas para controlar estas incautaciones de drogas, pero eso no es suficiente”, sumó.

“Las personas que tienen malas intenciones deberían tener la sensación de que aquí no pueden hacer lo que quieren”, afirmó Stephan Vanfraechem, de la organización empresarial Alfaport-Voka. “Esto sólo es posible con más personal sobre el terreno, más presencia”, agregó.

El pasado mes de mayo se creó una nueva fuerza policial para reforzar la seguridad portuaria, cuyos agentes ya se encontrarían operativos, según remarcó Paul Van Tigchelt, viceprimer Ministro de Bélgica y Ministro Federal de Justicia.

“Hace un año, la policía portuaria de Amberes contaba con 90 hombres”, explicó Paul Van Tigchelt. “Hoy, gracias a este cuerpo policial, hay 184. El reclutamiento de agentes adicionales está en marcha”, complementó.

Destruir droga más rápidamente

La Aduana de Bélgica quiere poder destruir más rápidamente las incautaciones de cocaína, las cuales son almacenadas en hangares para luego ser incineradas. Por tal motivo, la entidad está exigiendo mayor celeridad para poder reducir el riesgo de ataques.

En este sentido, Kristian Vanderwaeren, administrador general de aduanas e impuestos especiales de Bélgica, comentó que “por el momento, no se trata de una prioridad a nivel de distrito. Pido, por tanto, que esto se convierta en una prioridad. Es el caso de los Países Bajos, donde se están organizando para que en un plazo de unas pocas horas, un día como máximo, todos los embargos sean quemados”.

Finalmente, cabe agregar que sólo en octubre se incautaron 23 toneladas de cocaína en el Puerto de Amberes.