La Armada y la Policía Marítima de Portugal interceptaron un buque de carga general, bajo la bandera de Panamá, debido a información que sostenía que la nave llevaba a bordo una gran cantidad de cocaína de contrabando.
De esta forma, el Singapore Spirit fue llevado a Lisboa y atracado en el recinto portuario local, donde la policía desplegó un equipo para realizar la búsqueda de la sustancia ilícita, según comunicó FleetMon y Maritime Bulletin.
El alcaloide tendría origen en Trinidad y Tobago y el procedimiento llevó a la detención de 21 tripulantes. Asimismo, los registros AIS del barco no incluían el viaje por América del Sur, con el último Puerto de escala en Tekirdag.
De esta forma, la ruta comenzaba en el área del Caribe, Trinidad y Tobago, sin el tramo de Europa al Caribe. El destino final debió ser un puerto italiano.