Por Redacción PortalPortuario/Agencia Reuters

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Las aguas internacionales ubicadas al sur del Mar Rojo nuevamente fueron escenario de ataques dirigidos a buques comerciales, según informó el Ejército de Estados Unidos, mientras que el grupo hutí de Yemen reivindicó ataques con drones y misiles contra dos navíos israelíes presentes en la zona.

El Carney, un destructor estadounidense, respondió a llamadas de socorro y brindó asistencia luego de lanzamientos de misiles y drones desde territorio controlado por los hutíes, según el Comando Central de Estados Unidos.

El movimiento hutí de Yemen dijo que su armada había atacado dos barcos israelíes, el Unity Explorer y el Number 9, con un dron armado y un misil naval. Un portavoz del ejército del grupo dio cuenta que los dos navíos se convirtieron en blancos después de que rechazaron las advertencias dadas por los insurgentes, sin dar más detalles.

En una declaración transmitida, el portavoz comentó que los ataques fueron en respuesta a las demandas del pueblo yemení y a los llamamientos de las naciones islámicas para apoyar al pueblo palestino

En tanto, el ejército estadounidense informó que el Carney derribó tres drones mientras ayudaba a las naves comerciales. No estaba claro si el buque de guerra era el objetivo.

Asimismo, la entidad norteamericana explayó que los ataques eran una amenaza al comercio internacional. “También tenemos todas las razones para creer que estos ataques, aunque lanzados por los hutíes en Yemen, son totalmente permitidos por Irán”, consignó mediante comunicado.

“Estados Unidos considerará todas las respuestas apropiadas en plena coordinación con sus aliados y socios internacionales”, añadió.

Un portavoz militar israelí, el contraalmirante Daniel Hagari, señaló que los dos barcos no tenían conexión con Israel.

“Un barco sufrió daños importantes y está en peligro y aparentemente está en peligro de hundirse y otro barco sufrió daños leves”, dijo Hagari a los periodistas en Tel Aviv.

El incidente reportado sigue a una serie de ataques en aguas del Medio Oriente desde que estalló la guerra entre Israel y el grupo militante palestino Hamas el 7 de octubre.

En noviembre, los hutíes, aliados de Irán, se apoderaron de un buque de carga vinculado a Israel . El grupo, que controla la mayor parte de la costa del Mar Rojo de Yemen, había disparado anteriormente misiles balísticos y drones armados contra Israel y prometió atacar más navíos israelíes.

Compromisos múltiples

El granelero Unity Explorer, con bandera de las Bahamas, es propiedad de Unity Explorer Ltd y está administrado por Dao Shipping Ltd, con sede en Londres, según mostraron los datos de LSEG. Estaba previsto que el barco llegara a Singapur el 15 de diciembre.

El Number 9, que se dirigía al Puerto de Suez, es un portacontenedores con bandera de Panamá propiedad de Number 9 Shipping Ltd y administrado por Bernhard Schulte Shipmanagement (BSM), con sede en Newcastle-upon-Tyne, Reino Unido, según mostraron los datos.

BSM dijo en un comunicado a Reuters que el Number 9 está navegando actualmente y que no hubo informes de heridos o contaminación después del incidente. El barco fue alcanzado por un proyectil mientras transitaba por el estrecho de Bab al-Mandab, dio cuenta la compañía.

No fue posible contactar inmediatamente a los propietarios y administradores de Unity Explorer para hacer comentarios. Según el Comando Central de Estados Unidos, el Unity Explorer sufrió daños menores, mientras que el Number 9 también informó daños.

La empresa británica de seguridad marítima Ambrey y fuentes dijeron anteriormente que un granelero y un portacontenedores habían sido alcanzados por al menos dos drones mientras navegaban en el Mar Rojo.

Ambrey dijo que, según los informes, el portacontenedores había experimentado daños por un ataque con aviones no tripulados a 101 kilómetros al noroeste del Puerto de Hodeidah, en el norte de Yemen.

La agencia británica de Operaciones de Comercio Marítimo (Ukmto) dijo que había recibido informes de un ataque con aviones no tripulados en el estrecho de Bab al-Mandab, en el Mar Rojo.

La semana pasada, un buque de guerra de la Armada estadounidense respondió a una llamada de socorro de un petrolero comercial administrado por Israel en el Golfo de Adén después de que hubiera sido capturado por individuos armados.