Por Sebastián Betancourt
El desarrollo de los puertos chilenos es un tema que cada vez va tomando más prioridad en la agenda estratégica del país, incluso llegando a ser materia de propuestas de algunos candidatos presidenciales. Sin embargo, persiste la preocupación por los niveles de avance que este tipo de iniciativas han conseguido, razón por la cual tener capacidad portuaria “a tiempo” sería un tema crítico del cual preocuparse, según sostuvo Gloria Hutt, presidenta de la Asociación de Concesionarios de Obras de Infraestructura Pública (Copsa).
Al ser consultada por la forma en que evalúa el progreso de las iniciativas portuarias chilenas, la exministra de Transportes y Telecomunicaciones indicó que “yo creo que sigue avanzando; todos hacen mucho esfuerzo, tanto el sector público como el privado. Hay gran expectativa respecto a la capacidad portuaria que -a mi juicio- es el tema más crítico que hay que preocuparse, que es tener capacidad portuaria a tiempo y, por eso, el Puerto Exterior de San Antonio y la red logística a gran escala que tiene asociada es clave que siga avanzando. Siempre estamos topando en la velocidad a la que avanzan los proyectos y yo creo que en eso hay que poner mucha energía todavía”.
Ante la consulta si la permisología es uno de los factores a abordar para acelerar los distintos proyectos, la profesional remarcó que “yo le quito responsabilidad a los permisos mismos. Creo que se han desprestigiado mucho los permisos y no son, en sí mismos, el problema. El problema es la gestión, el Estado es una camisa que quedó chica y ya no responde a las dinámicas, a la velocidad con la que funciona el mundo. Entonces, necesitamos más bien medidas especiales de gestión para destrabar mientras vamos perfeccionando esa institucionalidad para que acompañe un mundo futuro mucho más dinámico”.
“La impresión que yo tengo es que se necesita una especie de medida especial, porque hay muchos proyectos que están trabajados. Lo que nosotros hemos recomendado desde Copsa y varios otros sectores relacionados con infraestructura es la formación de un grupo especial que dependa del presidente o presidenta de la República y que, en un plazo -por ejemplo- de seis meses, recomiende las medidas que hay que tomar para destrabar todas las medidas pendientes”, complementó.
En línea con lo anterior, Hutt remarcó que “la economía necesita reactivar las inversiones. Hay muchos proyectos -no solo portuarios, también viales y de concesiones- que están esperando su momento para empezar a transformarse en obras. Las obras implican empleo, consumo de materiales locales y reactivan directamente la economía”.
Al ser consultada si el trabajo público-privado está respaldando el desarrollo que necesita Chile, la exministra subrayó que “absolutamente y creo que todavía hay que perfeccionar mucho. Justamente porque hay más tecnología que nos permitiría tomar decisiones más rápido y mejores, juntar buena información, ser más precisos, programar mejor y, con eso, atraer más inversiones. Eso va de manera directa al desarrollo económico”.
De acuerdo con un análisis de la Cámara Marítima y Portuaria de Chile (Camport), la capacidad portuaria del país contaría con un margen operativo suficiente para responder a la demanda proyectada de los próximos diez años, considerando que los volúmenes movilizados se han mantenido prácticamente estancados durante la última década.













































