Por Redacción PortalPortuario/Agencia Reuters
Un grupo de comunidades panameñas, las que tendrían que reubicarse bajo el plan del Canal de Panamá para construir un embalse de 1.600 millones de dólares, presentaron una impugnación ante la Corte Suprema en la que sostienen que el proyecto -destinado a permitir más tránsitos de buques- es inconstitucional.
Unas 2.500 personas se verían afectadas por la construcción del embalse de Río Indio, según cifras de la autoridad del canal, que ha dicho que necesita asegurar más agua después de que una sequía la obligara a restringir el paso de navíos desde la primavera de 2023 hasta principios de 2024.
El embalse aumentaría la capacidad de navegación del canal en hasta 15 buques por día durante la estación seca y, además, proporcionaría agua potable a los 4,5 millones de habitantes de Panamá.
La Coordinadora Campesina por la Vida, el grupo de agricultores que interpuso la demanda, afirmó que la mayoría de los residentes no quieren ser reubicados. La demanda alega que el proyecto viola la Constitución por seis motivos, entre ellos el incumplimiento de los tratados ambientales y de derechos humanos firmados por el país.
El grupo también alega que la autoridad del canal no consultó adecuadamente a las comunidades afectadas. Asimismo, apuntó que el canal debería considerar un proyecto alternativo para ampliar un embalse alimentado por el río Bayano, el que no requeriría el desplazamiento de familias.
“El canal no ha hecho las cosas bien”, declaró Santander Tristán, abogado de las comunidades, ante el tribunal. “El proyecto Río Indio debe detenerse y se debe iniciar un proceso de diálogo”, agregó.
Por su parte, Florentín Chirú, vicepresidente de la Coordinadora Campesina por la Vida, sostuvo que la autoridad del canal mintió cuando afirmó que el 85% de las comunidades encuestadas apoyaban el proyecto.
“Nunca han hecho la pregunta crucial: señores, ¿quieren abandonar sus tierras, sí o no? Entonces, ¿qué clase de censo es ese?”, remarcó Chiru.
El representante del grupo también se opone a la construcción de una gran presa para contener el río Indio. Los ambientalistas han señalado que las presas están reduciendo la biodiversidad de Panamá.
Cerca de 100 agricultores y residentes de la zona de Río Indio protestaron frente al juzgado el jueves 31 e julio. “No nos oponemos al progreso. Nos oponemos a que nos quiten nuestras tierras sin que nos pregunten si eso es lo que queremos”, declaró Teodoro Rivas, de 64 años.
El embalse es parte de un proyecto de 8.500 millones de dólares para ampliar el canal y, con esto, para que pueda manejar más tráfico de buques y demanda de servicios portuarios, según señaló recientemente el presidente de Panamá, José Mulino.













































