Daniella de Luca Navarrete es Directora Académica Centro de Desarrollo Económico Internacional Universidad de Valparaíso y Socia Fundadora Click And Connect
En la industria marítima portuaria, las distintas tendencias mundiales, han impulsado gran parte de las políticas públicas de infraestructuras y modelos de desarrollo de los puertos a nivel nacional.
En este sentido, el desarrollo logístico nacional se ha enfocado en la infraestructura física, inspirados por modelos de “Gigantismo”, donde gran parte de la propuesta es ampliar los nodos y hacer cada vez más grandes los muelles, sitios de atraque, y zonas de carga, etc, pero hoy producto de la pandemia del Covid-19 hemos comprendido como la infraestructura digital ha “desplazado”- un poco – la discusión sobre el tamaño de los muelles y ha sido redireccionada a la búsqueda de sistemas que permitan integrar toda la operación logística del comercio exterior, pensando en los puertos como verdaderos nodos de integración multimodal en esta operación.
Sin lugar a duda, algo que nos ha dejado la pandemia de Covid-19, es que el futuro llegó a pasos adelantados, así como los sistemas de integración también, todos hablamos hoy desde el blockchain y los sistemas Big data, y que ahora se sumaría el 5G, pero poco conversamos respecto cómo integraremos estos sistemas en nuestra realidad logística portuaria.
El desafío que viene en el sector va más allá de las dimensiones del calado, sino que implica un sistema de redes de integración, rutas logísticas competitivas, cadenas de valor flexibles y sustentables… en fin cadenas colaborativas y con alto nivel de integración.
¿Cómo se ha venido organizando la industria en este rumbo? En el último tiempo hemos venido apreciando como diversos operadores del sistema marítimo portuario; como las líneas navieras, han estado integrando verticalmente partes de sus cadenas globales de suministro con operadores locales importantes en cada macrozona, de manera de evitar los intermediarios y así lograr ahorro tiempo y costos. La integración de los actores ha sido un espacio fundamental, para la etapa del desarrollo tecnológico, donde diversos modelos han permitido visualizar una cadena logística portuaria con altos grados de trazabilidad, sin papeles, altamente integrada y mucho más eficiente.
Pero estos esfuerzos no se logran sólo basados en la tecnología por si sola, sino que se debe analizar la operación logística de forma integrada y colaborativa, no necesitamos contar con diversos sistemas y que cada entidad maneje su clave particular, sino que es necesario, en primera instancia contar con un sistema logístico macro regional con integración de cada uno de los hitos y puntos de transferencias, tales como nodos portuarios, puertos terrestres, entre otros, que faciliten la integración multimodal, sistemas que no solo favorezcan la trazabilidad de la carga, sino además integre los modelos logísticos nacionales, constituyendo redes altamente conectadas y ajustadas a las necesidades de las zonas donde impactan, pensando en zonas costeras, pero también en zonas transfronterizas, generando eficiencia en cada paso y posibilitando el desarrollo de modelos de encadenamientos productivos.
Un modelo con plataformas logísticas, que integre corredores de carga logísticos portuarios, que hagan parte de las operaciones logísticas a las zonas no portuarias, que integren la logística en regiones con conexión transfronteriza.
Del mismo modelo se deben buscar formas de desarrollar la gobernanza en las operaciones logística, No es menor que una de las tendencias en la mayoría de las zonas portuarias, sea la constitución de comunidades logística- portuarias interconectadas con los diferentes actores de la cadena logística: terminales, medios de transporte terrestre, forwards, puertos secos, acopiadores, entre otros. Este gran paso nos muestra que la integración tecnológica, primero se logra con la integración de cada uno de los actores de la cadena.
El modelo portuario debe estar integrado entre sí, debe facilitar que los actores estén conectados en un modelo logístico sistematizado, donde los puertos sean más que sólo lugares de bajada y subida de carga, donde sean verdaderos nodos de intercambio que involucren la conexión tanto física, como de data entre los diversos actores que participan.