Por Redacción PortalPortuario.cl/Agencia Xinhua
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Empresarios y expertos de Chile y los países vecinos discutieron hoy sobre los beneficios y oportunidades para Sudamérica que trae la iniciativa de la Franja y la Ruta, propuesta por China, durante un foro celebrado en Iquique.
“Cuando el presidente chino, Xi Jinping, lanzó en 2013 la iniciativa de la Franja y la Ruta, nos alegramos y vimos la oportunidad que este programa representa para nosotros como ciudad-puerto de Iquique y para todas las ciudades del cono central de Sudamérica”, señaló en un discurso el alcalde de Iquique, Mauricio Soria.
La autoridad aseguró en la ceremonia que la iniciativa dará impulso a la construcción de carreteras, hidrovías, ferrocarriles, puertos, aeropuertos, conexiones de fibra óptica y energía, además de contribuir “al modo en que los países, regiones y ciudades sudamericanas accedan a fondos de cooperación”.
A esta reunión, organizada por la Municipalidad de Iquique, asistieron delegaciones chinas y chilenas, además de autoridades, empresarios y académicos de países como Argentina, Bolivia, Brasil y Perú.
La idea fue discutir los beneficios y retos que conlleva esta propuesta, que comprende la Franja Económica de la Ruta de la Seda y la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI, y cuyo objetivo es construir una red de comercio e infraestructuras que conecte a Asia con Europa, África y más allá, según ha dicho el mandatario chino.
La iniciativa de la Franja y la Ruta se ha convertido en los últimos seis años “en un concepto de cooperación más aceptado, un producto público más acogido y un proyecto de cooperación más participado a nivel internacional”, destacó al iniciar la cita el cónsul general de China en Iquique, Chen Ping.
Chen explicó que, en 2018, durante la segunda reunión ministerial del Foro China-CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños), se determinó extender la iniciativa hacia América Latina y el Caribe, “donde se ha llevado a cabo mucha cooperación”, con el propósito de alcanzar “el desarrollo compartido a través del intercambio político, la conectividad de las infraestructuras, la fluidez comercial, la facilitación del financiamiento y el entendimiento entre los pueblos”.
El diplomático remarcó que la iniciativa de la Franja y la Ruta no se tratará de imponer a los pueblos, sino que la construcción será conjunta, aplicando los principios de “consultar, compartir y construir” en conjunto con las naciones, con el propósito de lograr “un entendimiento de corazón”.
Esta nueva y “sustentable” Ruta de la Seda promete apoyar el desarrollo abierto, ético y verde, así como también “seguir promoviendo la conectividad terrestre, aérea, marítima e internética”, entre otros aspectos, añadió el diplomático.
Chen detalló que a la fecha, más de 150 países y organizaciones internacionales firmaron documentos de cooperación de la Franja y la Ruta con China, entre ellos 19 son de Latinoamérica y el Caribe.
Al iniciar la actividad, el subsecretario de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería chilena, Rodrigo Yáñez, recalcó que la iniciativa de la Franja y la Ruta abre la posibilidad “de conectarnos en diversos ámbitos y crear espacios de colaboración que permitan crecer, generar empleos y oportunidades entre los países”, además de atraer inversiones y llevar adelante diversos proyectos.
El vicepresidente ejecutivo de la Cámara de Comercio Asia-Pacífico, Álvaro Echeverría, expuso sobre los desafíos para las ciudades de Sudamérica en la incorporación a la iniciativa de la Franja y la Ruta. Destacó a China como un ejemplo de integración y apertura, ya que “hace las cosas de forma seria y de cara al mundo, lo que representa una oportunidad para economías como la chilena. El país asiático es hoy no solo una base de producción, sino también de consumo, con un mercado de más de mil millones de habitantes”.
Entre los desafíos para las ciudades sudamericanas, Echeverría resaltó la integración y el levantamiento de información económico y comercial. También la identificación de las fortalezas y ventajas del intercambio; el desarrollo de planes y proyectos de expansión; la mejora de conocimientos y contactos; la realización de acciones de promoción comercial y la unificación del trabajo entre el área público-privada, entre otros aspectos.
