A medida que las decisiones normativas y de política de emisiones continúan aumentando en todo el sector marítimo, Clarksons Research está siguiendo de cerca la adopción de tecnología “verde” que afectará a la industria del transporte marítimo de 883 millones de toneladas (el 2008 era de 1.028 millones) y una contribución del 2,4 % al CO2 global (y un 1,8 % de todos los GEI).

Steve Gordon, director general de investigación de Clarksons, comentó que existe “una participación récord del 61% de todos los pedidos en el primer trimestre fueron de combustible alternativo, excluyendo los transportadores de GNL, la participación fue del 48 % y el 10% de todos los pedidos fueron buques preparados tanto para GNL como para amoníaco.

En el primer trimestre de 2022, un 61 % del tonelaje pedido fue de combustible alternativo (excluyendo los buques metaneros, este fue un máximo histórico con el 48 % de los pedidos por tonelaje). El 57 % de los pedidos por tonelaje (101 pedidos de 9.3 millones de tonelaje bruto) fueron alimentados con GNL, con un 3,4 % de metanol como combustible (4 pedidos de 0.6 millones de GT), el 0,6 % de los pedidos con etano (2 de 0.1 millones de GT) y el 0,7 % incluido Propulsión híbrida de batería.

Otro 12 % de los pedidos eran “listos para amoniaco” (26 pedidos de 2.0 millones de GT), el 1,4 % “listos para GNL” (10 pedidos de 0.2 millones de GT) y el 0,1 % de los pedidos eran “Listos para hidrógeno” (3 pedidos de 15.000 GT), acorde a lo señalado por Hellenic Shipping News.

Según la agencia, “se debe tener en cuenta que estos suman un exceso del 100% del total de capacidad de los combustibles alternativos debido a una tendencia creciente hacia múltiples combustibles/combustible listo para brindar opciones futuras (en el primer trimestre, el 10% de los pedidos fueron combustible LNG más amoníaco listo). El 4,5 % de la flota y el 38 % del tonelaje de la cartera de pedidos funcionan  actualmente con combustible alternativo”.

De la cartera de pedidos, el 33,3% del tonelaje está destinado a utilizar GNL (647 unidades), el 2,3% a GLP (88 unidades) y el 3,2% a otros combustibles alternativos (200 unidades; incluyendo metanol (24), etano (11), biocombustibles (5), hidrógeno (6) y batería/propulsión híbrida (c.150).