El Servicio Nacional de Aduanas junto a la Seremi de Salud y Sernapesca detectaron, en Puerto Lirquén, un contenedor con conservas de Tritre que venían declaradas y etiquetadas como Jurel. El cargamento pretendía ser comercializado en la Región del Bio Bio y se falsificaron la declaración y el etiquetado.

El procedimiento comenzó gracias a un trabajo conjunto que permitió que la Unidad de Análisis de Riesgo de la Aduana de Talcahuano identificara y seleccionara para revisión un cargamento que venía desde el puerto de Callao, Perú, a una comercializadora de alimentos chilena.

Tras lo anterior y en virtud a las coordinaciones existentes entre los integrantes de la Mesa Público Privada de Comercio Exterior, la Unidad de Control de alimentos de la Seremi de Salud, Sernapesca y fiscalizadores aduaneros revisaron el contenedor y encontraron 1.550 cajas con 37.200 latas Jurel (Trachurus Murphyi) en conserva. Al abrir las latas se estableció que el contenido era de una especie distinta llamada Tritre (Ethmidium maculatus).

Los fiscalizadores establecieron que la declaración de ingreso, los documentos de referencia, el conocimiento de embarque, la factura, el etiquetado y los certificados de calidad indicaban que el producto era Jurel, por lo que se estableció la configuración del delito de contrabando por declaración falsa.

Debido a lo anterior, las mercancías fueron incautadas y la autoridad sanitaria remitió muestras a un laboratorio reconocido por el Ministerio de Salud para la certificación. Los productos tienen una valoración de $19.042.524.

El Director Regional de la Aduana de Talcahuano, Claudio Cid, destacó el trabajo conjunto y sostuvo que más allá de los derechos dejados de percibir y las multas y penas a las que se expone el importador y todos los involucrados.

“Lo importante es que evitamos el ingreso de un producto de dudoso origen a la población”, aseguró Cid.