Por Andrés Orrego Siebert
El excomandante en jefe de la Armada, almirante (r), Edmundo González, manifestó su preocupación sobre la pérdida de competitividad de Chile frente a los países vecinos que han acelerado el tranco en materia portuaria. A la vez, el ex alto oficial naval y presidente de la Liga Marítima de Chile sostuvo que el país debe poner atención al desarrollo de los corredores bioceánicos y a la posición estratégica que tiene la Región de Magallanes.
En entrevista con PortalPortuario, expresó -también- que Chile debe seguir fortaleciendo sus relaciones con los actores globales, entre ellos China y Estados Unidos.
¿Cuál es su evaluación de la realidad portuaria de Chile en relación a la Región latinoamericana?
Como presidente de la Liga Marítima de Chile, considero que la Región de Valparaíso y, en general, el Pacífico Sur enfrentan desafíos significativos en su desarrollo marítimo portuario. Nos hemos quedado atrás en la competencia hacia la conexión con el Asia-Pacífico, que es nuestro principal mercado de interés. Países como Perú, con proyectos como el Puerto de Chancay, avanzan rápidamente, mientras que en Chile enfrentamos retrasos excesivos en la implementación de proyectos clave debido a problemas de permisología y una planificación insuficiente.
¿Cómo se puede compensar esa cojera que evidencia Chile?
Es crucial equilibrar el desarrollo portuario con la protección del medio ambiente, pero sin caer en procesos interminables que afectan nuestra competitividad. La materialización de los corredores bioceánicos que conecten nuestros puertos con Brasil, Argentina, y otros países vecinos son fundamentales para el crecimiento económico y para posicionarnos como un puente eficiente hacia el mercado asiático. Además, debemos priorizar inversiones estratégicas en proyectos como terminales marítimos en el Estrecho de Magallanes, no solo para la exportación de productos como el hidrógeno verde, sino también para aprovechar nuestra posición geográfica única.
Profundizando en esto ¿Por qué es tan relevante la zona de Magallanes?
El Estrecho de Magallanes es una zona de importancia estratégica no solo por el desarrollo de combustibles limpios, sino también como un punto clave de transferencia hacia los principales mercados del Asia-Pacífico. No obstante, para materializar estas proyecciones, es imprescindible la colaboración coordinada entre las autoridades, el sector privado y los organismos reguladores, bajo un enfoque claro en la competitividad y la sostenibilidad.
¿Con quién tiene que relacionarse más Chile? ¿Con China o Estados Unidos?
Debemos fortalecer nuestras relaciones comerciales con China, nuestro principal socio comercial, sin descuidar oportunidades con Estados Unidos y otros actores globales. Chile tiene el potencial de ser un líder en la región, pero eso requiere voluntad política, inversiones estratégicas y un compromiso para superar las barreras actuales.
¿Cree que 2025 será un punto de inflexión para el desarrollo portuario?
Para el 2025, nuestra prioridad debe ser consolidar a Chile como un actor clave en el comercio marítimo internacional. Esto implica acelerar los proyectos portuarios pendientes, como el Terminal 2 de Valparaíso y el megaproyecto en San Antonio, reduciendo los tiempos de aprobación y ejecución. Si no actuamos con celeridad, otros puertos de la región, como Chancay en Perú, nos superarán con creces, especialmente cuando comiencen las fases más avanzadas de su desarrollo.
Usted mencionó que hay que estrechar la vinculación comercial con China y otros actores clave ¿Cómo se debe ampliar ese intercambio?
Para proyectar un crecimiento en la exportación de productos no tradicionales, como los provenientes de la acuicultura, que tienen gran demanda en Asia, es imperioso contar con un desarrollo de infraestructura portuaria que sea moderna y sostenible, de tal manera de garantizar el transporte eficiente de estos productos.
La Liga Marítima cumplió 110 años en octubre ¿Qué rol le cabe a esta organización en el Chile de hoy?
La Liga Marítima de Chile, como referente experto en asuntos marítimos, seguirá desempeñando un rol activo en la promoción de la importancia de alcanzar un equilibrio entre el desarrollo y la protección ambiental. En sus intervenciones en la esfera pública y privada, continuará abogando por la necesidad de establecer plazos razonables para la ejecución de proyectos, garantizando que Chile no solo mantenga, sino también fortalezca su posición como líder en la región. Todo esto, adaptándose a las exigencias del comercio marítimo global y consolidando alianzas internacionales estratégicas.