Por Redacción PortalPortuario
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La Autoridad Portuaria de Baleares (APB) presentó el balance de desarrollos y el plan de inversiones previsto para el Puerto de Maó, que contempla una programación de más de 97 millones de euros entre 2025 y 2030. La licitación de la nueva estación marítima del Cós Nou, la puesta en servicio del primer punto de conexión eléctrica para buques y la transformación de la Ribera Sur del puerto centrarán las iniciativas de 2026.
Dentro del primer trimestre de 2026, entrará en servicio en los muelles del Cós Nou el primer punto de conexión eléctrica para buques con tecnología OPS. Con un presupuesto cercano a los tres millones de euros, esta nueva infraestructura permitirá a los ferris conectarse a la red eléctrica terrestre y reducir significativamente las emisiones y el ruido durante su estancia en puerto.
Asimismo, dentro de los primeros tres meses del año que viene concluirán las obras de conexión entre Cala Corb y el muelle d’en Pons con una inversión próxima a los dos millones de euros. La actuación fue paralizada por la localización en la zona de un coral endémico que tuvo que ser translocado a otra parte.
Entre los hitos más destacados para el próximo ejercicio destaca la licitación de la obras de construcción de la nueva estación marítima del Cós Nou. Con un presupuesto de más de medio millón de euros, el proyecto básico y constructivo redactado por la UTE Port Maó, formada por las empresas Grimalt Nadal Morey Enginyers y Barceló-Balanzó Arquitectes, empezará a andar con el fin de poder inaugurar la nueva edificación a finales de 2027.
Puerto de Maó
El Puerto de Maó se encuentra de pleno inmerso en el proceso participativo “Port Maó. Horitzó 2030”, anunciado ahora hace un año a la comunidad portuaria. Se trata de una estrategia de participación ciudadana para reflexionar de manera colectiva sobre el futuro de la Ribera Sur del puerto de Maó. Todas las aportaciones recogidas de este proceso formarán parte del material base que se integrará en la elaboración del anteproyecto urbanístico.
También se encuentra en licitación el concurso para la gestión de una instalación náutica en enfocada prioritariamente al fomento de la práctica federada de la vela y el piragüismo. Tras un intercambio prolongado de impresiones con el sector náutico, la APB descarta en esta concesión obtener ingresos extraordinarios por las tasas y, en contrapartida, apuesta porque la empresa adjudicataria invierta en la promoción del deporte.
Ello es debido a un cambio en la estrategia de valoración de los pliegos concesionales de la APB, que da mayor ponderación a los aspectos sociales de las futuras concesiones que a los estrictamente económicos. Así, los criterios referidos al proyecto en sí, la memoria de explotación, las mejoras ambientales y la inversión a realizar pueden alcanzar hasta un máximo del 45% del porcentaje de valoración, similar al 40% que se destina a la promoción del deporte comprometida por parte del licitador. La rebaja de las tarifas a pagar por el usuario final puede llegar hasta 25%.
Por el contrario, la mejora de las tasas portuarias, es decir, lo que recibe la APB anualmente por la ocupación del dominio público portuario y la actividad comercial que aquí se realiza, se reduce a un 20% en esta nueva valoración.














































