Por Redacción PortalPortuario

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La Administradora de Infraestructura Ferroviaria (Adif) de España instalará un sistema que permite detectar y alertar sobre la posible caída de algún obstáculo u objeto sobre la vía para reforzar la seguridad en tres líneas que, en conjunto suman 430 kilómetros de extensión.

El proyecto tiene un costo de 38,5 millones de dólares e implicará colocar dispositivos en todo el eje Atlántico, desde A Coruña hasta Redondela AV (144 kilómetros); en el tramo del Corredor Mediterráneo a su paso por Tarragona que une L’Alboraya y L’Ametlla de Mar (199 kilómetros) y en el grueso de la conexión entre Sevilla y Cádiz (tramo Utrera-El Puerto de Santa María: 87 kilómetros).

La iniciativa comprende colocar sensores de caída de objetos en los pasos superiores que cruzan estas líneas de ferrocarril. Los dispositivos detectan la posible caída de un objeto desde estos pasos a las vías y la notifican, en remoto y en tiempo real, a los enclavamientos (dispositivos electrónicos que regulan a distancia todas las señales de un tramo de ferrocarril) y a los centros de regulación de la circulación (CRC)

En cuanto a la modernización de la red ferroviaria, en el caso de la Sevilla-Cádiz y el eje Atlántico, Adif desplegó el ERTMS, el sistema de señalización ferroviaria más avanzado del mundo y el instalado en la red de alta velocidad.

En el trazado del Corredor Mediterráneo entre Valencia y Tarragona la colocación de estos dispositivos se suma a las actuaciones que Adif termina de completar: el montaje del tercer hilo en la segunda vía del tramo Valencia-Castellón y el cambio de ancho (de ancho convencional a ancho estándar) en la línea entre Castellón y Tarragona.

Estas actuaciones contribuyen a los ODS número 9 (fomento de infraestructuras fiables, sostenibles y de calidad), número 7 (sostenibilidad) y 8 (crecimiento económico y generación de empleo).