Por Redacción PortalPortuario
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La ejecución de la segunda fase de la Nueva Terminal de Contenedores del Puerto de Cádiz cuenta con el uso de cemento ecológico que reduce las emisiones de CO2 entre 30 y 50% respecto a otros materiales ordinarios.
Se trata de un cemento III/A verde o de bajas emisiones de CO2, con el que se construirán los ocho cajones de hormigón que conformarán los 510,45 metros de la línea de atraque de la segunda fase de la terminal. El primero de ellos ha comenzado a construirse en la cajonera Kugira esta misma semana y se espera que en el plazo de alrededor de 80 días estén todos realizados.
Según las especificaciones técnicas, este hormigón es especialmente idóneo para la construcción de cajones portuarios debido a su elevada durabilidad comparada con cementos convencionales, a la vez que favorece la construcción sostenible reduciendo las emisiones de CO2, el uso de materiales reciclados, menor consumo energético y la disminución de consumos de recursos y generación de residuos a largo plazo, al ser más duraderas y requerir menor mantenimiento.
Considerando el volumen de hormigón de 48.000 metros cúbicos aproximadamente que se va a utilizar en la construcción de los ocho cajones, las emisiones de CO2 con el hormigón verde suponen una disminución de 56.310 Kg CO2 eq/por día, reduciendo la huella de carbono en 3.772.800 Kg CO2eq en el tiempo de fabricación.
La obra, adjudicada a Acciona por un importe de 54,6 millones de euros, forma parte del proyecto Cadiz Container Multimodal Terminal and Land Access. Phase II, cofinanciado por la Comisión Europea a través de la convocatoria 2021 de los fondos CEF (Connecting Europe Facility), ascendiendo el importe de la ayuda a 15,65 millones de euros.
Con esto, se busca ampliar el muelle ya ejecutado en la fase I en una longitud de 510,45 metros, con lo que se obtendrá una línea de atraque total de 1.100 metros, con calado de 16 metros respecto al cero del puerto. La superficie de explanada se incrementará en aproximadamente 10 hectáreas, obteniéndose de esta forma una terminal con un total de 40 hectáreas dedicadas al tráfico de contenedores (Lo-Lo).