Por Redacción PortalPortuario/Agencia Reuters
Estados Unidos ha mantenido discusiones internas sobre el uso de buques rompehielos de propulsión nuclear rusos para apoyar el desarrollo de proyectos de gas y gas natural licuado (GNL) en Alaska. Esto como uno de los posibles acuerdos a los que aspirar tras la reunión del presidente Donald Trump con Vladimir Putin, según dieron cuenta a Reuters tres fuentes familiarizadas con el asunto.
Trump aterrizó en Alaska el viernes 15 de agosto para lo que llamó una cumbre de “alto riesgo” con Putin de Rusia para discutir un acuerdo de alto el fuego para Ucrania y poner fin a la guerra más letal en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Tanto el mandatario estadounidense como el ruso, reunidos en una base aérea de la época de la Guerra Fría en la ciudad más grande de Alaska, buscaron obtener victorias en sus primeras conversaciones cara a cara desde que Trump regresó a la Casa Blanca.
La idea del rompehielos ha sido discutida entre funcionarios de la Casa Blanca como uno de los posibles acuerdos a intentar alcanzar con Rusia en la cumbre de Alaska, dijo una de las fuentes.
Las conversaciones en curso entre Estados Unidos y Rusia sobre Ucrania han incluido debates sobre acuerdos comerciales. La Casa Blanca planeó continuar con este enfoque en la cumbre del viernes 15, según la fuente, quien, al igual que los demás, habló bajo condición de anonimato debido a la delicadeza de las conversaciones.
La Casa Blanca no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. No fue posible contactar con funcionarios del Kremlin para que hicieran declaraciones.
Rusia opera la única flota del mundo de rompehielos con propulsión nuclear, que desempeñan un papel central en el mantenimiento del acceso marítimo durante todo el año a lo largo de la Ruta del Mar del Norte, una vía estratégica para los flujos mundiales de energía y comercio.
La administración de Trump está presionando para transportar gas desde el remoto norte de Alaska a clientes asiáticos. Trump ha presentado Alaska LNG , un proyecto de 44.000 millones de dólares para enviar gas natural licuado a lo largo de un ducto de 1287 kilómetros desde Alaska, a compradores asiáticos como una forma de reducir su dependencia del GNL ruso.
Otro proyecto, igualmente orientado a los mercados asiáticos, es Qilak LNG , que aspira a producir 4 millones de toneladas de GNL al año. Mead Treadwell, uno de los fundadores de Qilak LNG, afirmó que no sería inusual que un proyecto de GNL en Estados Unidos dependiera de rompehielos de cualquier país que el gobierno estadounidense permitiera. “Pero no lo hemos solicitado específicamente”, afirmó Treadwell.
Una fuente de la industria dijo que Alaska LNG “no tenía necesidades identificadas de rompehielos rusos”. Reuters no pudo establecer de inmediato qué proyecto específico, si lo hubiera, se beneficiaría si se alcanzara un acuerdo en las conversaciones de Alaska.
Los rompehielos nucleares también podrían facilitar el transporte de materiales y equipos de construcción a zonas remotas de Alaska, donde la infraestructura es limitada y las condiciones climáticas son duras.
