Por Redacción PortalPortuario
De acuerdo a un análisis de Drewry, los viajes cancelados para las próximas cuatro semanas alcanzarán las 56 salidas en blanco de un total de 719 zarpes anunciados. En promedio, se espera que el 92% de los buques inicien sus viajes según lo previsto.
La consultora indicó que entre la semana 49 (1 al 7 de diciembre) y la semana 1 de 2026 (29 de diciembre al 4 de enero) las principales rutas; es decir, la Transpacífico, Transatlántico y Asia-Norte de Europa y Mediterráneo, acumularán una cancelación de 8% del total de las salidas.
En las próximas cinco semanas, se contempla que la mayoría de los viajes en blanco se realicen en la ruta Transpacífico Este (48%), seguido por Asia-Norte de Europa y Mediterráneo (25%); y Transpacífico Oeste (27%).
“Los mercados de transporte marítimo de contenedores siguen en un estado de ajuste, mientras las tarifas, la capacidad y la dinámica de las redes continúan cambiando en las principales rutas Este–Oeste, con un posible regreso al Canal de Suez en el radar de todos”, indicó Drewry.
Las cancelaciones programadas (blank sailings) siguen siendo centrales para la disciplina de la oferta. Noviembre registró 86 cancelaciones, ligeramente menos que en octubre, lo que efectivamente añadió un 3% más de capacidad mes a mes. Los programas de principios de diciembre muestran 47 cancelaciones y un aumento proyectado de capacidad del 7%, manteniendo la oferta elevada y limitando las posibilidades de un repunte de tarifas en el corto plazo”, agregó.
Bajo este contexto, la consultora remarcó que “las recientes huelgas en Bélgica han añadido más disrupción operativa, con movimientos de buques y servicios ferroviarios brevemente detenidos y una congestión que probablemente persista hasta la próxima semana”.
“También se monitorea un posible regreso a la ruta del Canal de Suez, aunque los plazos siguen siendo inciertos. Cualquier cambio, ya sea gradual o a gran escala, impactará en los flujos de buques y en la programación, dependiendo de cómo las navieras decidan gestionar la transición”, añadió.
En línea con lo informado, al cierre del año, el mercado se encuentra en una intersección delicada, ya que la capacidad se expande, la demanda sigue irregular y las navieras aplican medidas tácticas para frenar la caída de las tarifas.
“Para los embarcadores, esto significa mantenerse proactivos: asegurar espacio con anticipación y seguir de cerca las señales del mercado. En un entorno donde las condiciones pueden cambiar rápidamente, la toma de decisiones informada será la cobertura más confiable contra la volatilidad”, concluyó Drewry.
