Por Redacción Grupo T21
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El proyecto de integración ferroviaria de Centroamérica con México se encuentra detenido y se espera que se reactive a partir del próximo año, dijo Miguel Ángel Samayoa, secretario adjunto y delegado regional de la Asociación Latinoamericana de Ferrocarriles (ALAF).
“Lamentablemente en Guatemala cada 4 años hay cambio de gobierno y cada gobierno que ha venido ha querido cambiar la situación con pleno desconocimiento de la situación y eso nos ha atrasado. Al conectar con México abrirá otras expectativas de los gobiernos de la región que podrán darse cuenta de lo que significa el ferrocarril para el desarrollo de nuestros países”, explicó.
La interconexión ferroviaria, aseguró, es importante para el desarrollo de la región centroamericana no solo para reducir costos sino también porque se unirán a más de 23.000 kilómetros de vías en territorio mexicano y se buscará conectarse con el Tren Maya y el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT).
Afirmó que el proyecto tiene garantizado la recuperación de los activos que han sido abandonados, generará una mejor recaudación fiscal, contribuirá a la competitividad de Guatemala, la eficiencia del transporte y logística de las mercancías y generará mayor comercio exterior, mayor seguridad porque reducirá el 30% del traslado de productos vía carretera, entre otros.
“Centroamérica tiene una relación con Norteamérica de 20-80, somos mayormente importadores, el modo de transporte actual es el carretero. El ferrocarril ha estado paralizado por mucho tiempo en la región y esto nos incrementa los costos de las mercancías”, apuntó durante su participación en el Seminario Internacional realizado por ALAF.
Por ello, reiteró que la interconexión es estratégica entre los ferrocarriles del Norte y Centroamérica, ya que actualmente se registra un gran conflicto en el paso fronterizo de la carga en Suchiate que se traduce en largos tiempos de espera, costos a la carga, baja recaudación fiscal, restricción de horarios y de paso libre de matrícula.
Mientras que en el paso ferroviario de Tecún Umán 1-Ayutla la obra civil está incompleta del puente fronterizo, así como la vía férrea de enlace y los patios de Ferrovías, ocupaciones ilegales en el derecho de vía, entre otros.
En tanto, en Puerto Quetzal existe un gran índice de ocupación de los muelles debido a la falta de infraestructura y logística para agilizar el manejo de mercancías y las vías de comunicación terrestre se encuentran en mal estado.
La interconexión entre México y Guatemala será el punto de inicio para continuar hacia El Salvador y Honduras, proyecto que data desde 2003, con el Estudio Centroamericano de Transporte, que tenía contemplado una vía férrea entre ambos países.
Entre las principales mercancías que se estarían moviendo a través de esta infraestructura se encuentran aceite de palma, látex de caucho natural, cajas de papel, cemento, almidón de maíz, polietileno, carbonato de calcio y harina de maíz. En una primera etapa se estarían transportando 8.208.217 toneladas, posteriormente más de 2 millones de El Salvador, Honduras, incluso Nicaragua y Costa Rica, y se pretende conectar con Panamá.
