Por Joaquín Torres Tagle
@PortalPortuario
Operadora de Grúa horquilla en DP World Lirquén y Técnica en logística Marítimo Portuaria, Jennifer Araneda relata en conversación con PortalPortuario.cl sus vivencias trabajando durante más de 20 años en el puerto ubicado en la Región del Bio Bio.
Detalla que al principio tuvo una recepción difícil, pero que a base de esfuerzo y dedicación logró ser parte integral de la empresa, cambiando la visión de los demás respecto al trabajo. Destaca que ha sido una “experiencia muy grata, llena de desafíos. Siento que es un crecimiento y aprendizaje constante”.
¿Qué la motivó a elegir este trabajo?
Ingresé al puerto y comencé una carrera como supervisora en distintas áreas. La verdad es que llegó un momento en el que esperada conseguir nuevos desafíos, fue así como comencé a ver la operación de equipos portuarios; como una opción de crecimiento. Llevo 20 años trabajando en el puerto y creo que siempre he tenido una orientación hacia los equipos portuarios, siempre me han llamado la atención. Además, como forma de complementar los conocimientos adquiridos en el puerto, decidí estudiar Técnico Logístico Marítimo Portuario.
¿Cómo ha sido su experiencia hasta el momento?
La verdad es que ha sido una experiencia muy grata, llena de desafíos. Siento que es un crecimiento y aprendizaje constante. Tengo muchas ganas de seguir perfeccionando mis conocimientos. Me encanta venir a trabajar, me gusta mucho lo que hago, y creo que soy muy afortunada por ello.
¿Qué recepción tuvo por parte de sus compañeros de trabajo?
Al principio experimenté un rechazo absoluto por parte de la mayoría de los compañeros, la verdad es que entiendo que eso viene del contexto de que el trabajo portuario siempre ha sido un rubro masculinizado, e identificado como un “trabajo de hombres”; entonces ver mujeres trabajando acá y en tareas de operación de equipos, era algo complejo para ellos. He tenido que validarme frente a otros y demostrar que soy capaz, y siempre he pensado que es necesario hacer más que otros, para demostrar que “me la podía”.
¿Y por parte de sus compañeras?
En relación a mis compañeras, el primer comentario que recibí fue “¿cómo vas a trabajar en eso, si es un trabajo de hombres”, a lo que yo respondí que no creía que fuese sólo para hombres, sino más bien que era una labor sin género asociado; operar maquinaria pesada no implica fuerza física, por lo que se requería más que nada motricidad fina. En la actualidad, las personas en general han cambiado su visión del trabajo, y también respecto a mi desempeño, si bien al principio fui más lenta por la falta de experiencia, creo que ahora me he equiparado y estoy trabajando al 100%.
¿Qué labores debe ejecutar diariamente como operadora de DP World Lirquén?
Principalmente trabajo en tareas de recepción y despacho. Actualmente suelo operar Grúa Horquilla 155, y espero entrenarme en el corto plazo en la Grúa H – 360, y en todas las máquinas en la cual se me dé la oportunidad.
¿Le recomendaría a más mujeres desarrollarse en el ámbito portuario?
Absolutamente, porque no nos podemos conformar con que alguien nos diga que es un trabajo de hombre. Somos libres de decidir que queremos hacer y en qué nos queremos desarrollar. Es muy importante trabajar en algo que te guste te llene y te haga feliz. Las mujeres somos capaces y si tenemos la oportunidad debemos tomarla. Merecemos lo que soñamos.