Juan Duarte es CEO de DUAGA y presidente de AAPA Latino

En un sector marítimo cada vez más dinámico, los movimientos estratégicos entre las alianzas navieras han sido una constante en 2024 y seguirán siendo claves en 2025. Los grandes actores del sector buscan adaptarse a las demandas del mercado, la competencia feroz y, especialmente, a las crecientes exigencias de sostenibilidad. Sin embargo, se plantea un cuestionamiento fundamental: ¿serán capaces de equilibrar la transición energética, la rentabilidad y su posición competitiva?

Cambios en las Alianzas Navieras para 2025

El cambio más significativo es la disolución de la alianza 2M entre Maersk y MSC, que tendrá efecto en enero de 2025. Maersk ha decidido formar una nueva alianza con Hapag-Lloyd, llamada “Gemini Cooperation”, que entró en vigor la segunda semana del mes de septiembre, aún cuando su lanzamiento oficial será en febrero de 2025.

Esta nueva asociación cubrirá las principales rutas Este-Oeste, con un enfoque en la mejora de la fiabilidad y la capacidad de adaptación a las fluctuaciones del mercado. La alianza gestionará una flota de 290 buques modernos y eficientes, con una capacidad combinada de 3.4 millones de TEU, muchos de ellos diseñados para utilizar combustibles más limpios y donde apuntan hacia una confiabilidad del cronograma del 90%; situación que despierta alarmas ante una posible condición anticompetitiva que viole las leyes marítimas.

Por su parte, MSC, al quedar fuera de 2M, está aumentando su flota de forma independiente, con la intención de seguir siendo un jugador dominante en el mercado global. Se espera que MSC continúe invirtiendo en la modernización de su flota, integrando tecnologías verdes como el metanol y el gas natural licuado (GNL) (CH Robinson).

En lo que respecta a Maersk, esta línea naviera ha seguido una estrategia ambiciosa en 2024 con un enfoque en inversiones sostenibles y expansión operativa. La empresa ha invertido más de 500 millones de dólares en el sudeste asiático para ampliar su capacidad de distribución en un 50% y aumentar la conectividad terrestre con camiones eléctricos (EV) y soluciones basadas en biodiésel (Maersk website). Esta expansión está alineada con su objetivo de alcanzar cero emisiones netas para 2040, lo que incluye la incorporación de 18 buques propulsados por metanol para 2025 y la construcción de hasta 22 portacontenedores de GNL de doble combustión y 16.000 TEU.

A nivel global, Maersk también ha firmado acuerdos para desarrollar infraestructura de combustibles verdes en colaboración con varios países. Estas inversiones son clave para garantizar una transición energética efectiva y mantener la competitividad, ya que el sector se enfrenta a crecientes exigencias regulatorias y de los consumidores (EuropaWire).

En lo que respecta a MSC, destacan anuncios recientes de cómo a su filial de MSC, Terminal Investment Limited, le fue adjudicada una concesión administrativa para la construcción y explotación por 50 años de una nueva terminal de contenedores por la Autoridad Portuaria de Valencia, y sobre cómo MSC llegó a un acuerdo con el Puerto Danés de Aarhus para el arrendamiento de un espacio y la construcción de una terminal de contenedores.
En cuanto a THE Alliance, que incluye a Hapag-Lloyd, ONE, Yang Ming, y HMM, esta alianza ha seguido invirtiendo en la mejora de la sostenibilidad y eficiencia de sus operaciones. Aunque Hapag-Lloyd dejará la alianza en 2025 para formar parte de Gemini, ha continuado invirtiendo en buques de metanol dual y expandiendo sus operaciones en rutas clave (Container Management).

El resto de los miembros de THE Alliance también han intensificado sus esfuerzos en sostenibilidad. ONE, por ejemplo, ha avanzado en proyectos de biocombustibles y electrificación en puertos. Yang Ming y HMM han centrado sus esfuerzos en la eficiencia energética, con iniciativas de puertos verdes que les permiten reducir emisiones de carbono y cumplir con las regulaciones internacionales. De la misma manera, HMM en una actualización sobre su plan de expansión indicó duplicaría su flota de portacontenedores mientras que aumentaría y diversificaría drásticamente sus operaciones en cargas a granel.

Sostenibilidad y Rentabilidad: ¿Se Pueden Equilibrar?

La sostenibilidad se ha convertido en una prioridad para las grandes navieras, pero plantea un reto significativo para las más pequeñas. Si bien los gigantes como Maersk, MSC y Hapag-Lloyd cuentan con los recursos financieros para invertir en tecnologías limpias y combustibles alternativos, las navieras más pequeñas podrían no tener la misma capacidad de adaptación. La adopción de buques de metanol, biocombustibles y electrificación conlleva un costo elevado, lo que genera dudas sobre la viabilidad a largo plazo de estas empresas en un entorno de transición energética.

El proceso de descarbonización es costoso y, aunque las grandes navieras están bien posicionadas para liderar este cambio, las más pequeñas podrían quedar rezagadas o verse forzadas a fusionarse con jugadores más grandes para sobrevivir. Esto podría conducir a una mayor consolidación del mercado y una posible disminución de la competencia (Home of Sustainability News).

Los recientes movimientos en las alianzas navieras, especialmente la creación de la alianza Gemini y la expansión independiente de MSC, son respuestas claras a la necesidad de mejorar tanto la eficiencia operativa como la sostenibilidad. Sin embargo, el equilibrio entre la rentabilidad y los objetivos de descarbonización sigue siendo una cuestión abierta.

En DUAGA, consideramos a la sostenibilidad como un pilar esencial para el crecimiento estratégico. Estamos comprometidos con la transformación del sector portuario y marítimo, por lo que colaboramos con socios clave para desarrollar proyectos que no sólo sean rentables, sino también consecuentes con el medio ambiente. Como mencionamos en el más reciente Encuentro de Protagonistas de la industria, la sostenibilidad ya no puede ser un lugar común en los diálogos. Este es ahora un eje atractivo, económicamente viable y es responsable. Como actores en el entorno portuario es nuestra responsabilidad contribuir al bienestar y sostenibilidad de las generaciones futuras.