Por Andrés Orrego Siebert

@PortalPortuario

Una muestra del déficit de personal para el control de ilícitos por parte de la Autoridad Marítima en los puertos es lo que sucederá en verano, ya que el esfuerzo se que se ha redoblado decaerá en la temporada estival debido a la necesidad de vigilar y aportar seguiridad en las playas. Así lo comentó el  vicealmirante Fernando Cabrera, director general del Territorio Marítimo y Marina Mercante, quien reconoció que existe un desafío en una tarea que es compartida entre la Armada de Chile y otras instituciones como Aduanas, la Fiscalía y las policías.

“En el último periodo como Autoridad Marítima hemos hecho un esfuerzo importante, y en compañía de Aduanas, de incrementar nuestra presencia en los puertos. Al menos, durante aquellos periodos, porque ustedes saben que tenemos déficit de gente, en los que no tenemos alta demanda por periodos estivales, nuestra gente abocada al control y fiscalización”, sostuvo.

El jefe de la Directemar, en esa línea, valoró el cambio en la legislación vigente que amplió el número de funcionarios. Sin embargo, reconoció que las plazas aún no están del todo ocupadas.

“Aumentó en el número autorizado, pero todavía tenemos que hacer esa gente; es decir, el número está aprobado por el Congreso, hay una ley fantástica que salió y nos vino a motivar para dar un mejor servicio, pero esa gente no se puede hacer de la noche a la mañana, entonces, nos va a tomar algún tiempo y ya, a través de la retención del personal, la incorporación de dotaciones más grandes en la escuela de grumetes y escuela de oficiales, nos va a permitir en el corto plazo ir cubriendo ese déficit e ir cumpliendo lo que la ley nos permite”, explicó.

Las nuevas plazas corresponden a 500 funcionarios gente de mar y 125 oficiales que constituyen un 30% de la dotación actual que se desempeña en el litoral, incluyendo a los puertos.

Cabrera reconoció que la seguridad y hacer frente al crimen organizado es un desafío para el país y que su correcto abordaje también dará más competitividad a los puertos y al comercio exterior.

“Es un desafío tremendo que tenemos como país. A la hora de estar pensando hoy día, porque se ha debatido mucho la presencia o puesta en marcha de Chancay en Perú que es una iniciativa tremendamente grande, el desafío que tenemos en Chile es mirar no solo la competencia a nivel internacional o la capacidad que podemos generar nosotros, sino cómo la enfrentamos y un factor diferenciador, además de la competitividad y capacidad de nuestros puertos, es cómo les brindamos seguridad en términos generales por la operación de los terminales, la operación de las naves, la seguridad, donde los prácticos y pilotos están considerados, pero -por sobre todo- los entornos que enredan todo el sistema portuario y sus accesos”, apuntó el alto oficial.

Sobre los medios desplegados para contribuir al fin de la seguridad en el ámbito marítimo portuario en Chile, el vicealmirante Cabrera comentó que “somos parte de un sistema y, efectivamente, nosotros hemos reforzado a través de varias líneas de acción. Una, incorporando tecnología, manejo de bases de datos, mejor inteligencia, coordinación con otras autoridades como la Aduana, Carabineros, el Ministerio Público, es un trabajo conjunto y ahí hay que ser generoso para compartir información y, entre todos, por distintas líneas de acción, lograr el objetivo”.

Infraestructura y cambio climático

El vicealmirante Cabrera, por otro lado, se refirió al cambio climático y a la infraestructura portuaria del país, afirmando que el país tiene que mejorar en esa materia.

“El cambio climático y las marejadas imponen ciertas dificultades a la operación portuaria, pero hay que entender dos cosas. Lo primero es que Chile requiere de mejor infraestructura, tanto para proteger sus puertos y dar mejor operación, así como para mejorar su capacidad en la medida que exista la demanda. Por otra parte, me gustaría manifestar que la Autoridad Marítima no es quien impide la maniobra, al contrario, la Autoridad Marítima quiere fortalecer y que las cosas se produzcan, simplemente, tenemos la responsabilidad de dar seguridad a las operaciones y al mantenimiento de los puertos, tráficos y líneas de comunicación”, afirmó el oficial.

“En Chile no se han modificado los puertos hace muchos años, así que estamos cerca (de recibir naves de 400 metros de eslora) en la medida que hemos podido ir adecuando los estudios de maniobrabilidad y a poder realizarlos. Se está estudiando y poniendo de manifiesto la forma de hacerlo con otro tipo de tecnología. Ya no basta solo el puerto, sino que la ayuda de sistemas especiales, mejores remolcadores, mejores unidades, aunque hay que pensar más allá, porque podemos tener esta misma caja por 100 años más, aumentar el tamaño de los buques, vamos a hacer más holgada la exigencia, pero ¿cuándo vamos a crecer? Esa es la pregunta que hay que hacerse”, reflexionó el timonel de la Directemar.