Por la ampliación del Canal de Panamá, inaugurada el pasado 26 de junio, han pasado hasta hoy 55 barcos neopanamax que han generado ingresos por más de 20 millones de dólares, informó el administrador de la vía acuática, Jorge Quijano.

Según la agencia ACAN-EFE, el funcionario presentó  un informe a la prensa extranjera acreditada en Panamá sobre el primer mes de operaciones del tercer juego de esclusas del Canal de Panamá, y proyectó que en los próximos dos a tres meses la ruta va a estar atendiendo 2 barcos a diario.

“Estamos mejor de lo esperado y dentro del presupuesto revisado para lo que queda del año fiscal 2016”, que termina el próximo 30 de septiembre.

Ese presupuesto calculaba en principio el paso de 346 millones de toneladas por la vía pero debió revisarse a la baja, para quedar en 335 millones toneladas, debido al atraso en la entrega de las nuevas esclusas construidas Grupo Unidos por el Canal (GUPC), liderado por la española Sacyr, explicó Quijano.

Las nuevas esclusas debían entrar en operaciones comerciales en abril pasado pero finalmente lo hicieron a finales de junio.

“Lo que perdimos de pasar entre abril y junio eso, si acaso, vamos a recuperar una fracción”, acotó el administrador de la vía panameña.

Quijano recordó que dada la sequía que azotó a Panamá en los primeros meses de este año la ampliación no opera a su máxima capacidad de calado.

El administrador señaló que es probable que la próxima semana se decida si se aumenta hasta en dos pies la capacidad de calado para permitir el paso de buques con mayor carga por el tercer juego de esclusas, una medida que favorecerá especialmente a los buques graneleros.

Quijano aclaró sin embargo que esa decisión va a depender del régimen de lluvias sobre la cuenca de la vía, dado que el nivel de los lagos que alimentan “crece lentamente”.

El calado actual en la ampliación es de 43 pies, precisó el administrador del Canal este martes.

En abril pasado ya Quijano había alertado que la ampliación iniciaría el servicio comercial con restricciones al calado de los buques, y adelantó que ofrecerá “los 50 pies óptimos” una vez los niveles de los lagos artificiales Gatún y Alhajuela se normalicen.

Quijano confirmó además este viernes que en las nuevas esclusas trabajan a diario unas 300 personas, y que cada tránsito es atendido con “más remolcadores de los necesarios” para mantener los estándares de seguridad.

En ese sentido, sostuvo que la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) investiga el incidente registrado el jueves pasado con el barco portacontenedores Xin Fey Xhou, de China Shiping, que impactó un extremo del muro de la nueva esclusa de Agua Clara, en el sector Atlántico.

Al buque se le abrió un agujero en el casco por encima de la línea de flotación de un tanque de lastre, confirmó el administrador.

Explicó que los representantes del barco siguieron su curso hasta fuera de aguas del canal para reparar el casco, sin presentarse al inicio de la pesquisa y contratando una empresa privada, por lo que la ACP solo hará una investigación administrativa interna para determinar las causas del incidente.

“Es el único incidente que se ha dado, que ocurrió cuando coincidieron fuertes vientos cruzados con un aguacero fuerte y visibilidad cero en el área de tránsito, pero la investigación se va a hacer”, aseguró.

Quijano comentó que “ya terminamos la ampliación, ahora estamos en la etapa de atraer a más y nuevos clientes, a un mes de la inauguración nos sentimos plenamente satisfechos porque hemos demostrado una vez mas que somos capaces de hacer grandes proyectos”.

La ampliación del Canal de Panamá tuvo un coste inicial de 5.250 millones de dólares, pero el monto final se conocerá “en unos dos o tres años”, una vez se resuelvan en arbitraje los reclamos de GUPC, liderado por la española Sacyr, por otros 3.500 millones de dólares.

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