Port de Tarragona recibe 63 recaladas de cruceros en la temporada

Por Redacción PortalPortuario

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Un récord histórico de 136.850 pasajeros y 63 escalas es el balance de la temporada de cruceros 2024 en el Port de Tarragona. De esa manera, se superaron los registros de 2019, que hasta ahora era las más altas en número de huéspedes, y consolidándose como destino clave del Mediterráneo.

La temporada ha vivido dos grandes eventos, la puesta en funcionamiento de la nueva terminal de cruceros situada en el Muelle de Baleares y la 64 edición de la Asamblea General de MedCruise.

Las previsiones para 2025 son muy similares a las cifras actuales, atrayendo a más cruceros premium y de lujo que aumentarán el número de escalas, pero no la cifra total de cruceristas.

Con un crecimiento de 19% respecto a la temporada anterior, el Puerto de Tarragona concluyó una temporada histórica, con 21.641 cruceristas más.

La cantidad de escalas también creció, con 63, por varias navieras internacionales, en comparación con las 57 de 2023. Este éxito se debe, en parte, a la consolidación de Tarragona como puerto base de la compañía MSC Cruises, que ha operado con 28 escalas los viernes entre abril y octubre, ofreciendo itinerarios que han atraído a miles de pasajeros.

Según el presidente de la Autoridad Portuaria de Tarragona, Santiago J. Castellà, “este éxito es fruto de la estrategia de las diferentes administraciones y empresas implicadas para atraer navieras de prestigio, mejorar las infraestructuras y reforzar la colaboración con los agentes turísticos del territorio”.

El Puerto de Tarragona también ha dado pasos adelante en su compromiso con la sostenibilidad, implementando medidas para reducir el impacto medioambiental de la actividad de cruceros.

Entre estas iniciativas destaca la nueva terminal de cruceros de Global Ports Holding que en su construcción y en las futuras operaciones de expansión se han integrado tecnologías y prácticas respetuosas con el medio ambiente, consiguiendo una reducción del 50% en la generación de residuos y una disminución del 60% en las emisiones de CO2 durante su fase de construcción.

El puerto también trabaja por la electrificación de muelles. En este caso está previsto que para 2026 el de Baleares se encuentre en uso para poder dar conexión a los cruceros y embarcaciones que se encuentren atracados en ese muelle.



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