Por Redacción PortalPortuario.cl
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En cumplimiento del cronograma previsto de acciones preventivas, la Companhia Docas do Rio de Janeiro (CDRJ) promovió capacitaciones en el Porto do Rio de Janeiro de acuerdo con el escenario del Plan de Control de Emergencias (PCE).
El entrenamiento teórico se realizó en el Auditorio de la Policía Federal y el simulacro práctico en el Muelle Público del Puerto, involucrando a actores internos y externos y cubriendo aspectos de preservación del Medio Ambiente y Seguridad Ocupacional.
La capacitación, que abordó el escenario hipotético de descomposición química de productos almacenados, fue coordinada por los equipos de la Superintendencia de Sustentabilidad Empresarial y la Gestión de Riesgos de Calidad, Seguridad, Medio Ambiente y Salud (SGCS) de la Autoridad Portuaria, con la participación de los áreas operativas de las Superintendencias de Gestión Portuaria de Rio de Janeiro y Niterói, de Ingeniería, de la Guardia Portuaria y de Bomberos.
Con el objetivo de mejorar las acciones conjuntas en respuesta a este tipo de accidentes, los operadores y arrendatarios portuarios también participaron por invitación del Organismo de Gestión de Mano de Obra (OGMO), el Equipo de Respuesta de Defensa Nuclear, Biológica, Química y Radiológica (NBQR) de Brasil. Armada y representantes del equipo de respuesta a emergencias del Instituto Estadual do Ambiente (INEA).
Los participantes recibieron orientación práctica y teórica sobre cómo actuar en casos de descomposición química de productos almacenados. La empresa ABRAPAM, contratada para realizar la capacitación, brindó un profesional especializado en el tema y un equipo de apoyo para trabajar en campo, además de abordar el aspecto de “seguridad” en la simulación, posibilitando que la Guardia Portuaria actúe con este enfoque en casos de emergencia.
Los organizadores explicaron que capacitar al grupo de respuesta a emergencias y al equipo operativo para los escenarios críticos previstos en el PCE permite una acción conjunta más rápida y eficaz; asiste en el flujo de comunicación entre equipos; difunde la cultura de seguridad en el trabajo entre los empleados; y apalanca una mejora continua del trabajo integrado, previendo, en un futuro cercano, la implementación del Plan de Asistencia Mutua (PAM).